Tecnología
La fibra óptica pública todavía tiene que llegar a un tercio de los pueblos de las Terres de l'Ebre
El despliegue se ejecuta en cinco municipio y doce pueblos más tienen los proyectos en redacción o pendientes de redactar
En las Terres de l'Ebre son 35 los municipios que ya tienen punto de acceso a la red troncal pública de la Generalitat (67%). Les obras todavía se están ejecutando en la troncal entre Batea y Gandesa (Terra Alta), en la canalización que hace la Diputació de Tarragona en Benifallet (Baix Ebre) y en la troncal de Camarles (Baix Ebre), Alcanar y la Galera (Montsià).
De los 12 municipios restantes, la mitad tienen el proyecto en redacción y en el resto todavía se tienen que planificar y ejecutar las obras. El secretario de Telecomunicaciones y Transformación Digital, Albert Tort, señala que el despliegue en Cataluña está al 75% y que el proyecto ha cogido «velocidad» gracias a los fondos europeos. Para los ejercicios de 2025 y 2026 se prevé una inversión de 80 MEUR.
Los municipios de las Terres de l'Ebre donde todavía se tiene que planificar y ejecutar el despliegue de la fibra óptica pública son Tivenys (Baix Ebre), Godall y Mas de Barberans (Montsià), la Fatarella (Terra Alta), y Miravet y Benissanet (Ribera d'Ebre). En fase de redacción está el proyecto del trazado alternativo de la fibra para la N-420 hacia Caseres (Terra Alta), está pendiente de que se le asigne presupuesto al proyecto de l'Ampolla (Baix Ebre), se tiene que redactar el proyecto para hacer llegar la fibra a l'Aldea (Baix Ebre) - desde el punto del polígono Catalunya Sud a través de la carretera C-42-, y también están pendientes de ejecutar las obras de la Diputació para extender la fibra a Paüls (Baix Ebre), el Pinell de Brai (Terra Alta) y la Palma d'Ebre (Ribera d'Ebre).
La red troncal de la fibra óptica pública no es una red de distribución urbana y la normativa no permite «un servicio finalista». Con el proyecto se hace llegar la fibra óptica de alta capacidad en los equipamientos de la Generalitat, como son escuelas e institutos, edificios sanitarios o administrativos. Los excedentes de esta red se ponen a disposición de los operadores para que estos puedan ofrecer los servicios a la ciudadanía. Actualmente, sobre la red pública ya desplegada, operan una decena de empresas de telecomunicaciones a 28 municipios de las Terres de l'Ebre.
Despliegue del 75% en Cataluña
El secretario de Telecomunicaciones y Transformación Digital, Albert Tort, ha destacado que ya se ha construido más de 5.000 kilómetros de red de fibra pública y que están en ejecución 2.000 kilómetros más, así como 1.500 kilómetros en proyecto. La fibra óptica pública ya llega al 75% de municipios y ahora se tiene que desplegar «en las zonas más complejas», «la fase más quirúrgica del proyecto».
La Generalitat ya ha conectado a la conexión de alta capacidad además de un millar de las más de 8.000 suyo que tiene en Cataluña. Cuando se conecten todas las sedes a la red propia pública y se complete el despliegue, el Gobierno prevé ahorrar más de 20 millones de euros anuales, un retorno de 12 euros por cada euro invertido.
Tort ha recordado que este es el objetivo principal, pero al mismo tiempo «es un modelo que contribuye que los operadores lleguen a zonas donde sólo con la iniciativa privada sería difícil que lo hicieran», sobre todo «porque no les saldría a cuenta por razones comerciales desplegar la línea con inversión privada».
Según el secretario de Telecomunicaciones, se trabaja dentro de los plazos previstos y «se avanza a buen ritmo» desde el año pasado, cuando se ha dispuesto de fondos europeos que «han permitido coger velocidad» al proyecto.