Sucesos
El incendio de esta noche inutiliza el matadero de Tortosa, que tendrá que trasladar la actividad
El equipamiento da servicio a una cincuentena de empresas con un volumen anual de sacrificios de un millón de toneladas
El alcalde de Tortosa, Jordi Jordan, visitando las instalaciones siniestradas del Matadero, este lunes por la mañana.
El incendio sufrido este domingo por la noche por el matadero de Tortosa ha inutilizado totalmente las instalaciones, hecho que obligará a trasladar temporalmente la actividad de sacrificio. Así lo ha anunciado el alcalde de Tortosa, Jordi Jordan, en una visita al edificio siniestrado. Según ha adelantado, se convocará este mismo lunes la junta del consejo de administración del matadero y durante esta semana la asamblea de usuarios para informarlos de la situación y las opciones de traslado. Les instalaciones están gestionadas por una sociedad mixta con 89% de capital municipal que da servicio a una cincuentena de empresas cárnicas y carniceros. Según su gerente, Valentí Valldepérez, se sacrifican en torno a un millón de toneladas anuales.
Los técnicos municipales se encuentran a la espera de la inspección de las instalaciones calcinadas por parte de la policía científica de los Mossos d'Esquadra para poder valorar su estado y emitir el correspondiente informe. De momento, el alcalde se ha limitado a transmitir los destrozos que constató el operativo de extinción de los bomberos, que llegó a destinar a las tareas de extinción hasta diecisiete dotaciones.
«Ha afectado un 100% la sala de producción, las cámaras frigoríficas, el techo y hay varias deformaciones en la estructura», ha recordado Jordan. También colapsó un falso techo. La parte de oficinas no resultó afectada. Situado en el polígono industrial Baix Ebre, del núcleo de Campredó, equipamiento estaba cerrado, sin ninguna actividad ni personas en el interior en el momento de declararse el fuego. El Ayuntamiento ya se ha puesto también en contacto con las aseguradoras para valorar la cobertura de los daños.
El siniestro obligará ahora a trasladar temporalmente la actividad de sacrificio -el equipamiento da servicio a empresas cárnicas de las Tierras del Ebro pero también de Vinaròs o Tarragona- a otros mataderos de la zona. Es lo que se pondrá sobre la mesa del consejo de administración de la empresa mixta y de la asamblea de usuarios. El gerente ha apuntado que las opciones alternativas que se pelean son instalaciones de Reus o pequeños mataderos en la zona de la Ribera de Ebro y la Terra Alta.