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El proyecto Garba muestra nuevas formas de investigar y de crear arte a partir de materiales y retos sociales del Ebro

La propuesta durará dos años y se presenta con las tres primeras intervenciones en la residencia artística de Lo Pati

Marc Navarro explicando su proyecto de investigación sobre el tren que forma parte de Garba a la residencia BalardeCedida

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En la residencia artística Baladre que gestiona el centro de arte Lo Pati, dan la bienvenida a los visitantes dos intervenciones, un grupo escultórico en los arrozales de Balada y una muestra de curiosos sombreros, todo hecho con materia orgánica. Les dos acciones forman parte del proyecto Garba, presentado este fin de semana en la casa artística.

Los sombreros son el resultado de la experimentación con materiales del delta del Ebro que ha hecho Sara de Ubieta, arquitecta, diseñadora y artesana, y las esculturas inspiradas en piezas de jardín y que recuerdan restos óseos gigantes son obra de David Bestué.

Dentro, el comisario Marc Navarro expone un proyecto de investigación sobre el transporte ferroviario y todos los problemas actuales de movilidad que genera el tren.

Haz es una iniciativa pensada para abordar los retos ecosociales del Delta y las Tierras del Ebro a través el arte contemporáneo y tiene como objetivo «estimular la colaboración entre los artistas, los científicos y la ciudadanía» para promover y experimentar con materias primas del Delta.

Con esta intención, durante dos años, se promoverán encuentros trimestrales y talleres con las escuelas de arte y con empresas y organizaciones del territorio, con quienes plantear nuevos usos de materiales.

Los impulsores de Haz se han propuesto «localizar y reivindicar» nuevos usos en los residuos de la actividad económica del delta del Ebro como es el caso del grupo escultórico de David Bestué que ha recubierto sus piezas de yeso con conchas de mejillones, flores, cáscara de arroz o fibras vegetales.

Con estos mismos materiales de «rechazo industrial y cultivo local» ha trabajado De Ubieta para encontrar las fórmulas y crear un amplio catálogo de sombreros. La diseñadora pensó en el sombrero «porque es una indumentaria representativa del Delta». «Habla mucho del territorio, ya que hay un soleado muy grande y porque se utiliza no sólo para trabajar, sino también para el ocio», ha detallado.

Tres ejemplos de una iniciativa a largo plazo

Como ha apuntado el comisario de Garba, los tres primeros proyectos ejemplarizan las diversas «maneras de investigar sobre el territorio y de poner en juego las prácticas artísticas y el trabajo sobre el lugar específico».

«Es decir, como trabajar desde un ámbito geográfico, como en este caso es las Tierras del Ebro, influye y da contenido y mejora una estructura de trabajo a las prácticas artísticas», ha detallado.

El proyecto surge de una beca de la Fundación Daniel y Muñeca Carasso que desarrolla actividades centradas en el apoyo y la promoción de proyectos que abordan retos ecosociales. También cuenta con la financiación de Lo Pati.

Les dos instituciones comparten el objetivo «de inspirar, crear conciencia y movilizar la comunidad» para «ayudar a imaginar y construir futuros sostenibles y acompañar proyectos basados en la colaboración entre artistas, investigadores de varias disciplinas.» 

«Al final se ha acabado configurando en formas de investigación y de poner a prueba y experimentar con las formas de investigación», ha remarcado Navarro.

El tren a debate

Navarro ha escogido un proyecto «inherente a los materiales y a la vida de las personas que habitan un territorio». La investigación que expone a Garba parte «de una problemática territorial», la carencia de transporte público colectivo a las Tierras del Ebro, y como funcionan, pero surge de esta voluntad «de fijarse en procesos o proyectos artísticos» que utilizan los trenes y autobuses como forma de creación o de protesta.

«Era importante para mí que hubiera un puente entre cuestiones más candentes en el territorio, que son muy palpables para los que vivimos aquí o teniendo familiares aquí, y otras cuestiones que se alejan del Delta del Ebro», ha explicado.

Además de los talleres con las escuelas de Arte Esardi d'Amposta y la Escuela de Arte de Tortosa, las tres intervenciones de Garba que se han mostrado a Baladre formarán parte de una iniciativa expositiva en el mes de septiembre. El proyecto se dividirá en encuentros trimestrales durante dos años.

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