Sucesos
El hombre encontrado muerto en las Casas de Alcanar apareció ligado y con signos de violencia
Investigan la posible implicación en el caso de una pareja con hijos que convivía con la víctima
Detalle de muebles en la terraza del apartamento de la víctima de las Casas de Alcanar donde se encontraba su perro y con la luz todavía abierta.
El hombre encontrado muerto en un apartamento de las Casas de Alcanar este jueves por la tarde estaba atado y presentaba evidentes signos de violencia, según han confirmado a la ACN fuentes próximas a la investigación. Vecinos alertaron el 112 después de comprobar de que el perro de la víctima llevaba bastante rato cerrado a la terraza, con la luz abierta.
Agentes de la policía local se trasladaron al inmueble y, posteriormente, con la ayuda de los bomberos, que tuvieron que entrar por un balcón, accedieron al apartamento, donde encontraron el cadáver. Los investigadores de los Mossos d'Esquadra, que han asumido el caso, intentan averiguar la posible implicación de una pareja con tres hijos que convivía con el hombre y que habría desaparecido horas antes del hallazgo.
La víctima es un hombre de nacionalidad francesa de avanzada edad que llevaba, como mínimo, unos cinco años viviendo de forma estable en un apartamento de la calle Aragó de las Cases de Alcanar, en un complejo de viviendas conocido como Ona de Mar. En el aparcamiento interior tenía también aparcada una autocaravana, que también habría desaparecido del lugar durante las últimas horas, según han explicado varios vecinos a la ACN.
Este viernes por la mañana, al bloque no quedaba rastro del suceso ni de la poco habitual presencia policial en las inmediaciones del edificio. Tampoco de la pareja con tres criaturas que, según los vecinos, vivía con la víctima. Les fuentes consultadas no han podido concretar qué tipo de relación existía -de familiaridad o amistad- entre estos y la víctima mortal.
Uno de los convivientes, al hombre de la pareja, de entre 30 y 40 años, lo ayudaba a pasear el perro por la zona y a menudo se lo veía practicando deporte por la zona. La víctima, según han apuntado las mismas fuentes, habría sufrido problemas de salud y no se dejaba ver a menudo por el pueblo durante los últimos tiempos. Los vecinos recuerdan que el miércoles, la mujer y las criaturas de la pareja se encontraban en la terraza posterior del apartamento -la misma donde se encontró el perro.
Desde entonces, nadie escuchó ruidos ni comportamientos anómalos provenientes de la casa de la víctima. Con todo, el hecho de que una vez los bomberos tuvieron que acceder al interior del inmueble por una terraza y que, una vez dentro, se vieron obligados a tirar la puerta abajo porque no apareció la llave que la cerraba podría dar pistas a la hora de aclarar el caso, de que se encuentra en manos la División de Investigación Criminal de los Mossos y bajo secreto de las actuaciones.
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