La inestabilidad del terreno prolonga la reparación del escape del CAT

La inestabilidad del terreno deltaico ha dificultado las tareas de reparación del escape de agua de la cañería del Consorci d'Aigües de Tarragona (CAT) que abastece los municipios del Montsià.

Una fisura de 80 centímetros provocó el corte del suministro el sábado la tarde. Eso ha afectado los vecinos de los municipios de Ràpita y de Alcanar, especialmente en la zona de Alcanar Platja, donde miles de usuarios ya no han podido disponer de agua potable desde este lunes en la madrugada a pesar de las medidas de ahorro.

El primer intento de reparación no salió bien y los técnicos del ente trabajan para sustituir ahora el tramo de cañería dañado para poder restablecer al servicio alrededor de las seis de la tarde, según las últimas previsiones.

Una fisura de 80 centímetros abierta en la parte central de un tramo de cañería de doce metros se encuentra detrás del incidente. Se trata de una cañería de polietileno de 630 milímetros de diámetro y que puede soportar una presión de 16 bares. Este lunes a mediodía, el director gerente del CAT se ha querido mostrar prudente sobre las posibles causas que lo han provocado y ha avanzado que lo investigarán.

Detectada el sábado por la tarde, los técnicos intentaron una reparación mecánica provisional uniendo los dos extremos. El hecho, pero, de situarse el tramo afectado en una zona deltaica, con «limos» y «poco consistente» ha dificultado y retrasado los trabajos. «No hemos podido estintolar la cañería contra los laterales de la zanja porque se nos caía encima», ha apuntado Pujol. Finalmente, se ha optado por sustituir el tramo afectado.

Una vez unida la nueva pieza y reparada la cañería, harán falta tres horas más para rellenarla de agua antes de retomar efectivamente el servicio. Esto supondrá que, durando casi 48 horas, el CAT no ha podido alcanzar los depósitos municipales de los municipios del Montsià.

Si bien Amposta y Sant Jaume d'Enveja, que reciben unos 50 metros cúbicos diarios, no se han visto particularmente afectados, otros municipios turísticos y más dependientes de este suministro, como la Ràpita y Alcanar, han sufrido cortes y restricciones, especialmente a partir de este lunes de madrugada, a pesar de las recomendaciones reiteradas de reducir el consumo.

«A primera hora de este -lunes- por la mañana nos hemos visto afectados. Uno de los depósitos se ha quedado sin agua de madrugada y el otro se ha ido nutriendo de agua de los pozos que tenemos. Solo una parte del pueblo tiene un poco de agua», ha explicado el primer teniente de alcalde de la Ràpita, Marc Brunet.

En Alcanar, especialmente, en la zona de Alcanar Platja, unos 1.500 abonados se han quedado se sin abastecimiento este lunes por la mañana. A raíz de la avería, se técnicos municipales, del CAT y de la concesionaria acordaron disminuir la presión para alargar la capacidad del pozo. «Pero a las tres de la mañana ya se ha acabado», ha subrayado el alcalde de Alcanar, Joan Roig.

Tanto Roig como Brunet han alabado el papel del CAT en el abastecimiento de agua de sus municipios y han agradecido la respuesta ante el incidente.

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