Municipal
La mejora de las estaciones de bombeo de pluviales en Amposta evita inundaciones en la zona deportiva
Adam Tomàs reclama obras en puntos críticos de la N-340 y la C-12 y agradece la ayuda supramunicipal para reparar caminos
La modificación de las estaciones de bombardeo de las aguas pluviales en Amposta se ha puesto a prueba con éxito durante el fuerte aguacero que ha afectado a la capital del Montsià este lunes por la noche. A raíz de las inundaciones por los chaparrones del 6 y 7 de septiembre, se han hecho obras para rebajar las bombas un metro y medio y se ha incrementado la potencia. Eso ha evitado que la zona de las instalaciones deportivas y de los Xiribecs se inunde, como era habitual.
El alcalde Adam Tomàs ha reclamado a Ministerio y Gobierno que actúen en los puntos críticos donde se inunda la N-340 y la C-12, afectando al núcleo urbano. Tomàs ha agradecido a la Generalitat que incluya la ciudad en la declaración de zona catastrófica porque los daños en caminos superarán el millón de euros de gasto.
El alcalde de Amposta, Adam Tomàs, ha reconocido que después de los aguaceros del mes de septiembre, y las habituales inundaciones en la zona residencial de los Xiribecs o las instalaciones deportivas, se inició una obra «de extrema urgencia» para modificar la estación de bombardeo, junto al canal de riego. La infraestructura «no estaba bien dimensionada» y se hizo una modificación, en tres semanas, que con los aguaceros de los últimos días se ha comprobado del todo eficiente.
La obra ha costado unos 14.000 euros, además de los trabajos de operarios de la brigada municipal. Las bombas se han rebajado un metro y medio para que empiecen a evacuar agua antes de que los pabellones y los equipamientos municipales se inunden, como pasaba hasta ahora. También se ha incrementado la potencia hasta el punto que han podido desembalsar 95.000 litros de agua por minuto, como hicieron en algún momento este lunes por la noche. En Amposta los últimos tres días se han acumulado 88 litros por metro cuadrado y los chaparrones más fuertes se produjeron el lunes por la noche, cuando parecía que la alerta por la DANA ya había acabado.
Plan de pluviales
El Ayuntamiento de Amposta ha ejecutado un 66% del plan de mejora de pluviales («en metros lineales») que empezó a desplegar en el 2018. Todas las actuaciones previstas tienen un coste de 12 millones de euros. Hace dos años se actuó en todos los pluviales de la calle Sebastià Juan Arbó, donde la lluvia de este lunes ha provocado algunos desperfectos que los operarios ya reparaban este martes por la mañana. También se derivó parte de las aguas pluviales en la Séquia Mare y el resto en los desagües de las bombas próximas al canal.
Actualmente, se está trabajando en el núcleo urbano, por ejemplo con el colector de pluviales de la calle Buenos Aires, que recogerá toda el agua que baja de la zona antigua de la ciudad, de los barrios de Quintanes o el Grau, y que se verterá al barranco de Simó.
Adaptación al cambio climático
El alcalde Adam Tomàs ha señalado que todas estas obras «a menudo» no se consideran prioritarias por parte de la ciudadanía y reciben críticas porque «pasan por delante de otras cosas». «Lo que está pasando, la forma de llover, está dando credibilidad que estas actuaciones son necesarias y las quiero hacer valer porque estamos construyendo la Amposta del futuro, con una adaptación al cambio climático», ha reivindicado el alcalde.
Tomàs ha aprovechado para agradecer la respuesta de todos los servicios de emergencias y trabajadores municipales, y también la responsabilidad demostrada por los ciudadanos durante el paso de la DANA en las Terres de l'Ebre. «Seguramente, lo que ha pasado en Valencia nos ha situado en un mapa mental que nos ha hecho coger a todos conciencia que eso no era una situación menor», ha dicho.
Mejoras en las carreteras y reparación de caminos
Tomàs ha aprovechado para reclamar las mejoras de los pluviales que el gobierno español y catalán tienen pendiente de ejecutar en dos puntos críticos de las principales carreteras de la ciudad, que se inundan «constantemente», en cada aguacero. La primera es el barranco de Núvols a la altura de la N-340. El alcalde de Amposta ha dicho que hace diez años que reclaman al Ministerio de Fomento, «por activa y por pasiva» una modificación del paso del barranco por debajo de la carretera. «Me consta que ahora se lo están planteando», ha avanzado. «Lamentamos que haya tenido que pasar todo el que ha pasado para que sea así, pero es un punto clave que afecta a Amposta y toda la gente que circula», ha insistido.
La otra petición es para la Generalitat, para que ejecute nuevos desagües de la C-12 y evite que el agua desemboque hacia el núcleo urbano de Amposta, inundando parte de Valletes y la zona deportiva. Aún así, Adam Tomàs ha agradecido al presidente de la Generalitat, Salvador Illa, y a la consellera de Interior, Núria Parlon, la preocupación y el interés que han tenido sobre los efectos de la DANA en la capital del Montsià.
Tomàs ha agradecido que se incluya la capital del Montsià en el decreto de declaración de zona afectada gravemente por una emergencia de Protección Civil (antes declaración de zona catastrófica). De esta manera, el consistorio podrá recibir ayudas para los numerosos caminos estropeados por las últimas lluvias, cuya reparación puede tener un coste que puede superar el millón de euros.