Los vecinos de Alcanar vuelven a la normalidad después de un aguacero que ha dejado 43,2 litros en media hora

Los vecinos de Alcanar (Montsià) se han apresurado a retirar el agua y los restos de barro de la tormenta de este miércoles por la noche. En media hora, el aguacero torrencial dejaba 43,2 litros al municipio, si bien no ha provocado daños personales. El centro del pueblo es el que se ha visto más afectado por las precipitaciones, especialmente bajos y locales.

En una reunión telemática entre el alcalde de Alcanar y el presidente de la Generalitat se ha acordado que el Gobierno participará en la próxima mesa técnica convocada por el consistorio canareu a finales de diciembre para analizar las medidas preventivas que hay que aplicar en la localidad para hacer frente a los aguaceros. Además, el alcalde ha pedido que se destinen los recursos humanos y técnicos especializados en lluvias torrenciales.

Las calles del centro de Alcanar han sido las más afectadas por el episodio de fuertes lluvias de este miércoles por la noche, en que en media hora se han acumulado 43,2 litros por metro cuadrado. El chaparrón ha comportado que en locales comerciales y bajos haya entrado agua, que esta mañana de jueves los vecinos se apresuraban a acabar de limpiar. También la brigada municipal se ha encargado de retirar los restos de barro de las calzadas y aceras, dejando prácticamente limpio el municipio desde primera hora. Aun así, algunos vecinos todavía retiraban con fregonas y cubos los efectos del chaparrón.

«No ha entrado ni la mitad de agua que la última vez», ha relatado a ACN Rafael Monzó, vecino de la calle Cardenal Vidal i Barraquer, por donde la lluvia se acumuló más durante el episodio de tormenta torrencial. Cómo es habitual ante el alerta por lluvias, tanto él como el resta de habitantes colocaron protecciones ante las casas y puertas de almacenes para evitar que el agua entrara en el interior.

Carmen Mari Martínez, que tiene la frutería apenas delante, ha explicado que cuando llueve con intensidad y durante mucho rato, en su calle se acumula más agua a causa del desnivel y la carencia de desagües que hay en este tramo. «El Ayuntamiento nos dijo que harían surtidores de agua en medio y final de la calle, pero ya hace más de diez años que continuamos igual», ha lamentado. Por todo ello, ya hace tiempo que cambió las cajas de cartón donde expone la fruta y verdura por otras de plástico y las coloca en puntos más elevados cuando la previsión meteorológica apunta a nuevas lluvias.

Compromís por parte del Govern

A raíz de este chaparrón, el alcalde de Alcanar Joan Roig ha mantenido una reunión telemática con el presidente de la Generalitat Salvador Isla para tratar esta cuestión. Roig ha definido el encuentro como «muy productiva» después de arrancar el compromiso del Govern de participar en la próxima mesa técnica que el consistorio canareu convocará a finales de año. A la vez, Roig ha pedido que la administración supramunicipal aporte los recursos humanos y técnicos necesarios para encontrar soluciones preventivas y hacer frente a las lluvias del próximo otoño.

Según Roig, en la anterior tabla técnica convocada en el municipio se ideó las balsas de laminado que han permitido rebajar el impacto de la lluvia a las urbanizaciones de la localidad. A pesar de esto, el alcalde ha reconocido que en el centro tienen detectados varios problemas cuando llueve con intensidad y baja agua sucia proveniente de la parte alta del término municipal que no se canaliza correctamente.

En este contexto, ha puesto énfasis en los trabajos de canalización de la zona baja, las cuales están pendientes de una segunda fase para la que son necesarios más recursos. «Tenemos un problema, que tienen que estudiar los técnicos, que es que pasa en Alcanar cuando baja esta agua sucia de la cordillera y el drenaje no es efectivo», ha subrayado. Con todo, Roig ha remarcado la necesidad de contar con técnicos especializados para encontrar una solución a esta problemática.