Una empresa recibe 2,25 MEUR de los Fondos Nucleares para duplicar la capacidad de la planta de Ascó

La empresa 2G Chemical Plastic Recycling ha recibido 2,25 millones de euros de los Fondos de Transición Nuclear para duplicar la capacidad de su planta en Ascó (Ribera de Ebro). Se trata de más de la mitad de la inversión total de 4,4 millones de euros que la compañía quiere invertir en los próximos dos años para mejorar la tecnología pionera utilizada actualmente para el reciclaje químico de residuos plásticos.

En concreto, se sustituirá el actual reactor por dos nuevos y más innovadores. De esta manera, pasará de producir 7.500 toneladas anuales a 15.000. Además, se ampliará la plantilla con ocho trabajadores -25 en total- y siete ingenieros más. Este es uno de los 43 proyectos empresariales que se beneficiarán de los 23,7 millones de euros de los Fondos Nucleares 2024.

El secretario de Empresa y Competitividad y consejero delegado de ACCIÓ, Albert Castellanos, ha visitado este martes por la mañana las instalaciones de la empresa en Ascó. Lo ha hecho acompañado del socio, fundador y director general, Daniel Vega, así como otros responsables de la planta, a los cuales le han explicado el proceso «pionero» que utilizan para el reciclaje, químico de residuos plásticos. «Es revolucionario, ya que da una solución circular a los plásticos que hasta ahora no eran reciclables y acababan en el vertedero y, por lo tanto, suponen millones de toneladas de residuos en todo el mundo», ha detallado Vega, quién ha añadido que de esta manera también se reduce la dependencia del petróleo como materia prima.

Y es que mediante un innovador proceso de reciclaje químico, basado en la economía circular, la compañía obtiene aceites pirolíticos, que sirven de materia prima a la industria petroquímica para la fabricación de nuevos plásticos vírgenes a partir de material reciclado. «De esta manera cerramos el ciclo de forma infinita», ha subrayado Vega.

Crecer una planta por año

Actualmente, la compañía recicla en la planta de Ascó -de 5.000 metros cuadrados de superficie- residuos plásticos procedentes de toda Cataluña y del conjunto del estado español y los comercializa ya convertidos en aceites pirolíticos en refinerías locales y en el extranjero. De hecho, exporta el 25% del producto elaborado. El objetivo sin embargo, se seguir creciendo y expandirse al mercado español y europeo. De momento, la empresa ya prevé construir el próximo año una nueva planta de 15.000 toneladas en Portugal y está firmando contratos con otras ingenierías para abrir más instalaciones donde introducir su tecnología.

«Nuestro objetivo es crecer una planta por año a partir del 2026», ha detallado Vega. De hecho, a partir del 2026, la compañía también prevé volver a incrementar la capacidad de la planta que actualmente tienen en Ascó y ampliarla hasta las 25.000 toneladas.

Por todo, Castellanos ha descrito el proyecto de esta empresa catalana como «muy especial», no sólo por el crecimiento industrial que supondrá, con la creación de nuevos puestos de trabajo, sino también por el impulso de un «nuevo mercado de carácter circular», el cual «dará una nueva vida a los plásticos de rechazo». De hecho, este «elemento de circularidad» ha sido uno de los motivos por los cuales se ha otorgado 2,25 millones de euros de los Fondos Nuclear, dentro de la línea de subvenciones a inversiones empresariales de alto impacto, a esta compañía de Ascó.

Te puede interesar: