Diari Més

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La Associació Poble Vell de Corbera d'Ebre se disuelve por falta de relevo y apoyo del consistorio

La entidad critica que el Ajuntament alquilara la Església Vella de Sant Pere a terceros sin consenso y perjudicándola

Una de las letras que forman parte de la obra 'Abecedari de la Llibertat' de Joan Brossa, ubicada en el Poble Vell de Corbera d'EbreCedida

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La Associació Poble Vell de Corbera d'Ebre ha comunicado que se disuelve y cesa toda su actividad. La entidad ha gestionado durante treinta años la conservación del Poble Vell de Corbera d'Ebre, arrasado por las bombas durante la Batalla del Ebro y la guerra civil española. La decisión, como explican en un comunicado, se debe a la falta de relieve después de la dimisión de la junta, encabezada por Anna Pedrola, el octubre pasado. La entidad acusa problemas económicos y denuncia la falta de apoyo del Ajuntament de Corbera d'Ebre, al cual acusa «de no haber creído completamente en el potencial» del conjunto histórico y patrimonial. También lamentan la decisión del consistorio de alquilar a terceros la Iglesia de Sant Pere, que los ha perjudicado.

La Associació Poble Vell de Corbera d'Ebre que cesará toda su actividad a partir de este sábado, agradece el apoyo de los numerosos vecinos y vecinas que «han luchado incansablemente, de manera voluntaria y desinteresada» por la preservación «de un patrimonio único», un espacio reivindicado como «el emblema de la memoria histórica de Cataluña». Además del trabajo de conservarlo, hacer difusión y mejorar el espacio con una vertiente artística y reivindicativa en favor de la paz, la entidad ha recibido en estas tres décadas a más de 20.000 visitantes de todo el mundo, y su disolución supone «una pérdida irreparable» que no se tendría que permitir.

La Asociación, que empezó como un patronato, reivindica que ha conseguido generar puestos de trabajo y repercutir económicamente en los negocios del municipio. Según la entidad, los tres sitios de trabajo que sostenían «se han visto gravemente comprometidos» con la decisión del Ajuntament de Corbera d'Ebre de alquilar, desde 2020, el espacio de la Església Vella de Sant Pere y el Poble Vell en terceros. La ordenanza municipal aseguran que no se consensuó con el ente gestor del espacio, ni ha supuesto ingresos para la entidad ni el conjunto patrimonial.

«De rebote, ha provocado que la Asociación no haya podido dar acogida a centenares de visitantes (muchos de ellos con reservas previas y venidos de lejos) durante los días que se alquilaba a terceras personas o empresas, proyectando una imagen lamentable de cara a los usuarios», critican en el escrito. De hecho, lamentan «que el Ajuntament de Corbera nunca ha creído completamente en el potencial del Poble Vell y ha ignorado de forma sistemática las inquietudes, peticiones, propuestas y demandas» de la Asociación.

Señalan que la inversión del consistorio en el espacio «ha sido prácticamente nula», así como la de las administraciones superiores, aunque el Poble Vell es un Bien Cultural de Interés Nacional. Incluso acusan al Departamento de Justicia de haber «contribuido de manera indiscutible a la degradación que el espacio ha sufrido en la última década», cuando muchas casas y edificios se han hundido definitivamente sin que las instituciones «hayan hecho nada» y «a la vez, prohibiendo» que interviniera la entidad.

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