El cortometraje de ficción 'Sorda' gana la octava edición del Festival de Cine de la Terra Alta

El cortometraje de ficción «Sorda», de Eva Libertad y Nuria Muñoz Ortín, ha sido el ganador de la octava edición del Festival de Cine de la Terra Alta, el In-FCTA. El premio se ha anunciado este sábado por la noche, en una gala de clausura en el campo de fútbol de Bot, punto neurálgico del festival.

El jurado profesional ha valorado la innovación sensorial y la historia que explica para hacerla merecedora del galardón La programación del In-FCTA pone así el punto final en la edición de este año, después de una semana llena de proyecciones de cortos y películas «de alta calidad», con obras que han sido distinguidas en otros certámenes. Según el director del festival, Ivan Massagué, después de ocho años ya están presentes en circuitos cinematográficos.

El municipio de Bot, con poco más de 500 habitantes, ha vuelto a ponerse en el mapa cinematográfico de la mano del Festival de Cine de la Terra Alta, el In-FCTA. El acontecimiento llega este año a la octava edición reforzante los vínculos con el pueblo y el séptimo arte.

Este sábado por la noche ha bajado el telón con la entrega de premios conducida por los maestros de ceremonias Mireia Aixalà, Juli Fàbregas y Jordi Díaz. Para calentar motores, el campo de fútbol de Bot ha abierto puertas unas horas antes para organizar actividades enológicas, gastronómicas y culturales dentro del recinto, con la subasta de las pinturas de los artistas visuales Xavier Oliach (Gasic), Mar Martos, Dera Wells y Jordi Costa (Saik) y la amenización de la música de los dj's oficiales del festival.

Poco después, se han dado a conocer los premiados de esta edición, donde «Sorda» de Eva Libertad y Nuria Muñoz Ortín se ha llevado el premio Lo fato a mejor cortometraje. La obra narra los problemas de comunicación de una pareja, el Ángela y Darío, en que ella es sorda y él es oyente.

Entendemos que el jurado ha valorado la innovación sensorial, el hecho de grabar desde el punto de vista de una persona que no oye y los conflictos que puede generar vivir así. Me parece que habrá futuro con este corto», ha augurado el director del festival, Ivan Massagué.

En el marco de la sección Highland Pro, uno de los otros cortometrajes que también que ha resultado premiado en la octava edición del festival ha sido «El rey de la semana», de David P. Sañudo, que se ha llevado los galardones Lo Fato al mejor guion, mejor actor y mejor dirección. El de mejor actriz ha recaído en Miriam Garlo, en el corto «Sorda», mientras que el premio del público ha sido para «Cinco» de Javier Cuenca.

Con respecto a la sección Highland, el público ha escogido «Habes nuntium» de Marina Olegó como Lo Fato del Público y «A la carta» de Iván Vigara como mejor cortometraje. En relación a los jóvenes talentos, «Uranites» de Marina Arenas ha sido distinguido con Lo Fato Talent Jove y «Ocho pasos» de Alexandra Croitoriu ha estrenado con premio Lo Fato In-FCTA FEM, dirigido a mujeres directrices. Finalmente, «La mireia i en pompom» de la Escuela Doctor Ferran i Cuaen ha resultado galardonado en la categoría In-FCTA Mini.

Para escoger los premiados, el jurado profesional integrado por Pol López, Maria Molins, Biel Duran y Aida Folch ha tenido que deliberar a puerta cerrada este sábado por la tarde después de visualizar 150 cortometrajes de temáticas variadas a lo largo de una semana.

Un programa con elementos de km0

Más allá de los premiados, a lo largo de toda la semana In-FCTA ha propuesto un programa donde el cine se ha relacionado de forma directa con otros elementos culturales, como la música, la danza, la pintura o el teatro. Al mismo tiempo, se ha hecho en un marco gastronómico y enológico que vincula el certamen con la zona, con una clara apuesta por el producto de km0.

Según la organización, esta cita anual se emplaza en un contexto alejado de los circuitos culturales de las grandes ciudades, un hecho que los diferencia de otros festivales. «Cuando es el mismo pueblo, la sociedad, quien genera iniciativas de este tipo, es diferente, porque se levantan de otra manera», ha remarcado a la codirectora del festival, Úrsula Agut Suárez.

A la vez, a lo largo de toda la semana se han celebrado talleres relacionados con el doblaje, la caracterización y otras vertientes del cine. Precisamente con la voluntad de buscar la interacción directa con los participantes, este año se ha celebrado un taller de creación comunitaria a cargo de Mar Grifoll e Imma Vidal donde se ha trabajado la expresión corporal para crear una performance que se ha estrenado en la gala de clausura.

Doce horas de metraje

En total, el festival ha programado sesiones de cortometrajes y películas de géneros variados que han conformado doce horas de metraje de proyección, entre sección oficial y de otros fuera de concurso. La organización ha seguido apostando no sólo por los productores profesionales, sino también por aquellos que se están formando, a través de la sección Talents, y las direcciones femeninas en el In-FCTA FEM.

Entre las novedades de esta edición destaca la incorporación de un nuevo espacio de proyección «más íntimo», donde se ha podido ver un cine «desgarrador de autor». Se trata de la sala de Cine Club, que ha servido al mismo tiempo para homenajear de nuevo la figura de Josep Mulet, quien ha mantenido abierta la sala de manera ininterrumpida en los últimos 60 años. Este sin embargo, no ha sido el único homenaje de la octava edición de In-FCTA; en la gala de inauguración se hizo un sentido recuerdo a la actriz Itziar Castro, quien murió el pasado diciembre.

Seguir creciendo de cara al futuro

De cara al futuro, el director del festival, el actor Ivan Massagué, se marca como reto «crecer» desde el punto de vista de la innovación y la creatividad, de la mano del pueblo de Bot y las localizaciones que ofrece este municipio de la Terra Alta.

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