Sectarismo en el hospital de Reus
Regidora de Cs a l’Ajuntament de Reus
Me despierto este lunes con una llamada y varios whatsapps en los que me avisan de que en el Hospital de Sant Joan hay una parada de la ANC repartiendo propaganda separatista. Me envían fotos de los panfletos que se está repartiendo. Nada nuevo. Un cúmulo de mentiras y promesas sin ningún sustento real para animar a la gente a creer que en la ansiada República catalana las fuentes manarán leche y miel. ¿Cómo rebatir mentiras y fantasías? Sobrecogida por la impudicia de estar repartiendo esto en un centro de salud, donde mucha gente sufre y está dispuesta a creer cualquier cosa que prometa mejorar su situación, entro a analizar un texto que me llama especialmente la atención. Se trata de una carta abierta a los latinoamericanos.
Este colectivo ha sido tradicionalmente ninguneado por el separatismo, puesto que es más reacio a cambiar su lengua por la lengua sagrada del Régimen. Pero, claro, en este momento, hay que sumarlos. Y qué mejor que invocar su pasado colonial (en el que los catalanes no tuvimos nada que ver, por supuesto. Sólo hay que recordar cómo la defensa acérrima del proteccionismo dio lugar a la pérdida de Cuba donde éramos los amos). Pasado que les iguala con Cataluña, de la que algunos dicen sin pudor que es una colonia. El mundo al revés: los colonizados catalanes son ricos y los colonos españoles desempeñan, en general, los empleos más humildes.
Volviendo al panfleto. Se basa en un artículo de un escritor y economista nacido en México llamado Agustí Tola. ¿Agustí? A ver si va a ser tan falso como la carta de la preciosa adolescente, Abril, difundida en el portal cataladigital.cat pidiendo que fueran a votar por ella. Lástima que la impostura quedó al descubierto cuando un lector, Sergi, escribió: «¡Qué bien habla Emily Rudd el catalán siendo de Estados Unidos como es y qué concienciada que está con el tema!». Efectivamente, la foto es de una modelo y actriz nacida en Minnesota. Una falsedad más.
De las cosas que dice el tal Tola, mejor ni hablar. Desde acusaciones a Ciutadans hasta la falsificación flagrante de la historia de Cataluña. Nada a lo que no nos tengan acostumbrados. Pero lo realmente grave y lo que desde Ciutadans queremos denunciar es que la presidenta del consejo de administración del Hospital, Noemí Llauradó, portavoz de ERC en el Ayuntamiento de Reus, en lugar de guardar la neutralidad debida a su cargo, haya autorizado esta fechoría, utilizando dicho cargo para favorecer su opción política.
Cuando se lo hemos reprochado, se ha escudado en que ha habido otras autorizaciones anteriores para repartir panfletos en el Hospital como la de la Plataforma Antideshaucios. Hay que ser sectario para comparar la promoción de la ruptura de la convivencia dentro de la misma Cataluña y con el resto de españoles con la lucha por un derecho básico como es la vivienda. Gracias, presidenta.
Una vez más, hemos de aguantar que desde los resortes de poder que han conseguido ocupar en su totalidad, se nos ofenda a la mitad de los catalanes que no queremos la separación, que queremos arreglar las cosas, no romperlas, que queremos ser, junto con el resto de españoles, libres e iguales ante la ley. Desde Ciutadans siempre lucharemos contra las falacias con las que se quiere imponer el pensamiento único desde un Govern que nunca ha gobernado para todos los catalanes.