El gobierno socialista defiende vuestras pensiones

Preocupación. Es el primer sentimiento que han compartido muchas personas al escuchar las sorprendentes declaraciones del «gurú económico» del PP, el señor Daniel Lacalle, mano derecha (y nunca mejor dicho) de Pablo Casado y miembro clave del equipo económico del Partido Popular. Pues bien, según este responsable del PP –por cierto, ex gestor de fondos de inversión-, las pensiones públicas en nuestro país tendrían que reducirse un 20, un 30 o un 40%. Según la derecha del PP-Ciudadanos-Vox el debate no tiene que ser cuanto van a subir las pensiones, tal como defendemos los socialistas, sino cuánto deben recortarse.

¿Qué supone esto para los casi 170.000 pensionistas que tenemos en las comarcas de Tarragona? Hablando claro y en plata: que cada jubilado que cobra, de media, 986 euros mensuales de pensión pasaría a cobrar…592 euros al mes. O sea, casi 400 euros mensuales menos. ¡Menos!

Nos preocupa, francamente, lo que quiere hacer el bloque de la derecha con el sistema público de pensiones de este país. Veréis como de aquí a les elecciones intentaran pasar de largo de este tema y centraran todo su discurso en las banderas, los lacitos, los colores y las esencias patrióticas (exactamente igual que hacen los independentistas) pero los socialistas queremos alertar a tiempo del peligro que supondría para el pacto de Toledo el que las tres derechas sumen y logren llegar al poder. No vamos a permitirlo. El presidente Pedro Sánchez se comprometió este mismo domingo en Tarragona a que el gobierno socialista defenderá el Pacto de Toledo y el poder adquisitivo de las pensiones. Vamos a garantizar la dignidad de las pensiones (porque son el fruto del trabajo de toda una vida y no un regalo de nadie), vamos a asegurar su sostenibilidad y vamos a evitar que el PP-Ciudadanos-Vox convierta las pensiones en una mercancía sujeta al mercado. No son una mercancía señor Casado, son un derecho que los socialistas vamos a preservar.

Pero para ello necesitamos llenar las urnas de votos. ¡Que nadie se quede en casa el día 28! Cada voto suma porque que nadie tenga la menor duda que si los señores Casado, Rivera y Abascal llegan a los 176 diputados tardaran menos que en Andalucía en repartirse el gobierno. Y entonces será demasiado tarde para lamentarlo…

Tanto para el PP-Ciudadanos-Vox como para el independentismo el enemigo está claro, se llama Pedro Sánchez y su gobierno de progreso, feminista y ecologista. Solo hace falta que repaséis las declaraciones de los señores Casado, Rufián, Rivera y Puigdemont de hoy mismo: todos contra Pedro Sánchez. ¿Por qué? Porque comparten la estrategia de la confrontación. El «cuanto peor, mejor» que nos ha llevado al desastre institucional en Cataluña. Los independentistas defienden un «frente de bloqueo» (¿y qué harán cuando toque votar la revalorización de las pensiones? ¿«Bloquearan» también el incremento de las pensiones?), mientras la derecha quiere hacer retroceder el reloj de la historia 40 años a tiempos que considerábamos felizmente superados. Así pues, las coses están claras, el 28 de abril en las urnas o votamos avanzar o hacemos como los cangrejos, tirar para atrás. O progresamos garantizando la convivencia o optamos por «bloquearlo todo» a la espera de que el señor Puigdemont y el señor Torra opten por activar lo que ellos llaman el momentum (que sería una repetición más acusada de la declaración unilateral de independencia de octubre de 2017).

Los socialistas nunca, ¡nunca!, hemos interpretado la política como un instrumento de confrontación. Ni ayer, ni hoy, ni mañana. Nosotros estamos en política para solucionar los problemas de la gente: para subir el salario mínimo y los sueldos de los trabajadores, para volver a invertir en dependencia y becas para los jóvenes, para garantizar las pensiones públicas, etc. Y en este sentido, tome nota señor Casado, vamos a evitar que la derecha juegue con las pensiones que los pensionistas se han ganado con el sudor de su frente trabajando toda la vida. Con gobierno socialista vuestras pensiones dignas están garantizadas y serán revalorizadas de acuerdo con el IPC. Más claro el agua.