Estoy harto de que las canciones hablen siempre de amor. Los que dejamos de ejercer en la Flash Back cuando sonaba «Born to be Alive» de Patric Hernández, al oír letras como «su piel morena se marchó dejándome un vacío eterno en mi corazón» tenemos ganas de llamar a Trapero y pedirle que cree la Brigada Anticursis de los Mossos. Armados con esposas cubiertas de espumillón rosa irrumpirían en Karaokes y plenos municipales para detener a los que «cantan» mal. Creo que las canciones actuales tendrían que tratar temas de actualidad, porque el amor ha quedado en el interés ciudadano por debajo del paro y el precio de los helados de Hacendado. Por eso, ayer, viendo lo que ocurrió en el Parlament con Micky Dancing me acordé de aquella cancioncita que se titulaba «El probe Miguel». Como tenéis algo más importante en la vida que recordar la letra de la canción de Triana Pura, os la recuerdo. Creo que se escribió en los años noventa, pero veréis qué actual es:
«Ay, que le estará pasando al “probe” Miguel / Que hace mucho tiempo que no sale. /Tra laralará. Tra laralará. Tra laralará. Tra laralará. / Me dicen, me dicen que Miguelito / Entre nosotros se encuentra muy extraño. / Él dice que es feliz en la montaña / Que se está convirtiendo en ermitaño. / Tra laralará. Tra laralará. Tra laralará. Tra laralará».
¿Qué? ¿A que es poesía pura? Ya me he ido calentando con esto de la música y quería poneros la letra de «Sí, pero no», de Lolita, pero era muy cursi. La que de verdad se está llevando mucho es una que escribió José María Pemán.