¡Hola amigos! ¿Cómo ha ido el fin de semana? Discutiendo en la sobremesa sobre si tenemos que continuar haciendo «correbous», ¿no? Así, todo normal. Estoy contento porque han entrado en mi cuenta corriente cuatro duros de derechos de autor de mis libros. Aunque siempre me decís que os gustan mucho los «Manaments», no tengo buena imagen. Diría que incluso algunos no me pueden ni ver. Y por eso he decidido gastarme los dineros de los libros en iniciar una campaña que se llamará «Moisés Global» y que me llevará una empresa de comunicación. Así que durante estos días podréis ver en la televisión anuncios de mis vecinos diciendo que soy un hombre fantástico, generoso y que voy cada domingo a misa. También aparecerán cuñas de radio con mis ex revelando que hago el amor mejor que Julio Iglesias, y directores de periódicos llorando de emoción declarando que nunca en toda su vida habían tenido a un periodista tan ordenado y trabajador como yo. Castellers diciendo que soy el mejor «enxaneta» que ha tenido la colla, aunque pese 100 kilos. También saldrá un antiguo director de Caixabank, de la oficina del Barrio Fortuny de Reus, afirmando que desde 1976, en que abrí la cuenta, nunca he estado en números rojos y que una vez que pasó se habían equivocado ellos. También se emitirá un coloquio en TAC12 sobre mi persona, destacando que soy un tío cojonudo. Neus Bonet dirá en Catalunya Radio que soy el miembro del Col·legi de Periodistes de Catalunya de quien se siente más orgullosa. Y, para acabar, una «cheerleader», vestida solo con una barretina, paseará un cartel de «Moisés Global» en los plenos de los ayuntamientos. Ahora que lo pienso, mejor cambiaré el nombre de la campaña. Creo que se tendría que titular «Excusatio non petita, accusatio manifesta».