'Manaments', el libro

Claro, vosotros vais leyendo y riendo cada mañana con el café y los Manaments y no os dais cuenta, pero yo pinto una rayita en la pared por cada artículo que escribo. La mujer ya me ha pedido el divorcio si no la limpio, porque está más pintarrajeada que la puerta del váter del Parlament. ¿Recordáis aquel coñac, el «501»? Pues he escrito la misma cantidad de artículos, si no me ha engañado la calculadora. No me fio mucho del trasto porque lo he comprado por Aliexpress en China y podría ser que tuviese el «coronaviruji».

Señores, el domingo que viene, 1 de marzo, hará dos años que me despierto en la cama con una idea diferente de la que me había llevado a las sábanas la noche anterior. No entremos en detalles. Dos días después de aparecer el primer Manament, Jordi Folck, de la editorial Veus Públiques me dijo en una cafetería de la avenida Sarrià de Barcelona que de esto con el tiempo se podría hacer un libro. No le hice muchos caso porque Jordi ve una historia hasta cuando pisa un zurullo en la calle. Tampoco sabía que este artículo se haría tan popular. Sobre eso quiero hablaros: No tengo claro que soltéis un euro si vengo a vuestra casa por Navidad con una estampita que diga: «Moisés le desea buenas fiestas». Aquello del aguinaldo que recordaréis de antaño. Una señora de Torredembarra me dijo que cada día recortaba el artículo y lo metía en una cajita, y pensé que quizás hay gente que no ha podido seguir mi ritmo. Es normal, soy un genio. Amigos: por Sant Jordi tendréis en las librerías y sex shops un libro que se titulará «Los 155 Mandamientos». Pep Escoda me ha hecho una foto espectacular para la portada. A ver si cuando os tengáis que rascar el bolsillo también os reís tanto.