Tengo un dilema respecto a destinar a los peatones el tramo final de la Rambla. De hecho, tengo un problema general con las zonas sin vehículos: no me gusta andar. Pero, por otra parte, también creo que nos hemos acostumbrado a ir en coche a comprar el pan o depositar los avales al Tribunal de Cuentas. Me gustaría que se pensara que los aparcamientos de motos son escasos para la ciudad que tenemos y, además, he visto que en algunos lugares se han reducido para poner patinetes. Os lo traduciré por si no conoce el lenguaje administrativo: «Si no hay sitio y aparcas en la acera, te meteré una multa que te cagarás». Ahora creo que se ha entendido mejor. Así que ya tenemos dinero de los parkings subterráneos o con sofrito, de las zonas de colores, las multas y el impuesto de circulación. ¡Mira que bien! Seguro que has pasado alguna vez por ese túnel de la plaza Verdaguer. Sí, amigos, aquello es un gueto para moteros. Hacen reuniones del estilo «Hola, soy el Moisés y no sé dónde dejar la moto» y los otros contestan «Hola, Moisés, te queremos». Si vas en moto a una terraza de la plaza de la Font, no pidas nada para picar, porque ya te habrás comido la Mobilette.
También me gustaría que se pensara a reducir proporcionalmente el que se paga de impuesto de circulación a medida que vas «peatonalizado», porque, claro, si cada vez hay menos «calles de circulación», es de gilipollas pagar para andar, aunque no me extrañaría, porque en la política también hay quien no tiene la ITV pasada al cerebro. No sé si sabe que se me cagó encima un animal. Por el peso del «envío» diría que era un Boeing 747. Considerad que si vais en coche se te cagan también encima, pero los insultos no manchan.