La piscina de Torredembarra
Regidor no adscrit de Torredembarra
El señor Rovira, alcalde de Torredembarra, en 2019, pocos días después de ser nombrado alcaldable, nos presentó una serie de ejecuciones repartidas en cuatro años que quería llevar a cabo si salía elegido alcalde y así fue con el respaldo de 2.308 votos.
Una de ellas, la estrella de esas propuestas, la cubierta de la piscina municipal, que tenemos que recordar que en el mandato 2015-2019 por activa y por pasiva ERC decía «no» a este proyecto, mientras la oposición demandábamos la cubierta de esta piscina municipal, usted señor Rovira se hizo el abanderado de estas demandas con el consentimiento y aprobación de la oposición.
El proyecto, que se redactó y fue aprobado en 2018, entraba en su aprobación definitiva en sesión plenaria programada. Allí se dio cuenta de las características, plazos y presupuesto, que alcanza los 1,65 millones de euros a financiar mediante un crédito bancario. En este último pleno todos dimos luz verde al inicio de lo que parecía una obra que, a priori, se haría realidad en breve.
Pues bien, lejos de lo dicho y lejos de lo aprobado, no ha sido así.
El señor Rovira, una vez más faltó a la verdad y utilizó propuestas solo para ganar votos, engañando así a los ciudadanos de Torredembarra.
Lo que parecía que sería la inversión más importante de los presupuestos de 2021, ha dejado de serlo y la han guardado en el cajón desastre del Ayuntamiento, dejando paso a la colocación del Alfa & Omega, que ya es cierto y notorio que su finalización sea antes de final de año.
Las instalaciones de la piscina municipal se pusieron en marcha solo para los meses de verano y cuando llegue el invierno tendremos que seguir pasando frío en la antigua piscina cubierta por una lona y que, si no quieres coger un resfriado, mejor que te lleves un albornoz y un calefactor.
El proyecto de la cubierta de la piscina tenía por objetivo una duración de ejecución de nueve meses. A fecha de hoy no han entrado ni los obreros. Tendremos que esperar para ver las clases de gimnasia en el agua y otras actividades acuáticas.
El señor García, teniente alcalde y, presuntamente responsable de la ejecución de esta obra que debería ya estar acabada, dijo que: «El proyecto es la guinda que culmina la mejora de la oferta deportiva de la ciudad» y, Rovira apuntaba que «la nueva piscina cubierta podrá dar servicio a los usuarios locales, además de los que podrían venir de municipios vecinos» a este proyecto, a lo que di mi voto a favor sin dudarlo ni un momento, sin pensar que detrás de esa propuesta no había intención de llevarla a cabo y que no era la prioridad de ERC, tal y como había vendido.
Tal y como les he dicho, mi voto fue a favor, al igual que también voté a favor de la remodelación de la pista de atletismo, pero me siento engañado, al igual que el resto de muchos torrencs que no ven con buenos ojos que el gobierno proponga proyectos y después estos no se llevan a cabo, al igual que las propuestas que hicieron con la finalización de la calle Pere Badia o el paseo Miramar.
Señor Rovira, basta de faltar a la verdad, basta de jugar con la gente de Torredembarra, basta ya de que su mala gestión y sus parches que repercutan negativamente a toda Torredembarra.
Torredembarra ya se ha dado cuenta de que usted vende humo para su propio beneficio, solo deseo y pido a los ciudadanos de Torredembarra que tengan memoria y dentro de nueve meses recuerden esta pésima gestión a la hora de ir a votar.