Calafell vuelve a afrontar la regulación de los clubs de cannabis después de la explosión de una vivienda donde se cultivaba marihuana
El gobierno lamenta que la última normativa quedó en nada porque no consiguió la mayoría absoluta del pleno
Encuentran cien plantas de marihuana y botellas de gas en la casa a buen seguro de Calafell donde se ha producido una explosión
El gobierno de Calafell quiere volver a ponerse manos a la obra con la regulación de los clubs de cannabis del municipio. Después de que el domingo se produjera una explosión en una vivienda donde se cultivaba marihuana para un futuro club que tenía que abrir al municipio, el Ayuntamiento quiere acotar una normativa para «cubrir el vscío legal que hay en el cultivo de droga, que ahora facilita muchos abusos», señala el alcalde Ramon Ferré. Así, la intención del gobierno «no es restringir», sino «poner orden» sobre la distancia mínima de los centros educativos, horarios, aforos o sistemas de evacuación de humo. En abril del año pasado, el pleno aprobó una propuesta de regulación, que quedó en nada porque no consiguió la mayoría absoluta necesaria para sacar adelante un plan especial.
Ramon Ferré admite que los clubs decannabis son una actividad legal, pero lamenta que la explosión del domingo donde quedaron heridos dos chicos en que han sido denunciados por los Mossos D'Esquadra demuestra que «esta figura legal puede ser aprovechada por personas o grupos que nada tienen a ver con el autoconsumo de cannabis».
Para afrontar la nueva regulación, el gobierno ha creado una mesa de trabajo donde invita la oposición a definir los parámetros por la concesión de licencias a los clubs de cannabis. Actualmente, estos establecimientos pueden obtener el permiso de apertura si se ajustan a una legislación general.