El alcalde del Vendrell evita la cuestión de confianza pactando los presupuestos con C's y PP
El gobierno mantiene negociaciones con PxC y ERC para sumar también su apoyo
El gobierno del Vendrell (PSC, PDeCat y un concejal no adscrito) ha anunciado este martes un acuerdo con Ciutadans y el Partit Popular para aprobar los presupuestos municipales del 2017, hecho que evita que el alcalde Martí Carnicer se someta a una cuestión de confianza, como él mismo había anunciado. Con los votos de C's y PP, el gobierno se asegura una mayoría de 13 concejales del plenario.
Después de dos meses de negociaciones, el ejecutivo local también ha acercado posiciones con PxC y ERC, que han presentado varios requisitos para facilitar una abstención. El gobierno, sin embargo, no da por «firme» este posicionamiento y mantiene conversaciones con los dos partidos para aclarar cuál será su voto. Carnicer ha aplaudido que el presupuesto esté garantizado en un año que ha definido como «excepcional» para poder reinvertir los 5 millones de euros provenientes del uso de instalaciones municipales por parte de la empresa encargada del servicio de agua.
Martí Carnicer, acompañado de Eva Serramià (PDeCAT) y el concejal no adscrito, Josep Marrasè, han anunciado el pacto para salir adelante el presupuesto destacando la complejidad de la negociación, y criticando especialmente la actitud de Som Poble y Sí Se Puede que, aseguran, no han respuesto la propuesta que el gobierno les presentó a finales de marzo.
En cuanto a la negociación con el resto de grupos, Carnicer ha aplaudido la entendida con los tres regidores de Ciutadans y los 2 del Partit Popular para aprobar unas cuentas que, asegura, «representarán un salto cualitativo y cuantitativo importante». Con todo, en la rueda de prensa de este martes, el gobierno no ha avanzado ninguna cifra del presupuesto, aplazando la presentación oficial a la semana próxima, pocos días antes del debate en el Pleno.
El alcalde sí que ha destacado, pero, la «excepcionalidad» del presupuesto de este año por el ingreso de 5 millones de euros provenientes del canon del uso de las instalaciones municipales que hace Aqualia dentro de la nueva concesión de Aigües de Tomoví. Este dinero se prevé destinar las obras de la escuela de música, a resolver la liquidación pendiente de la empresa Esports i Lleure y a la ampliación de la isla de peatones.
Carnicer ha señalado precisamente estas tres inversiones para justificar el anuncio de semanas atrás, cuando dijo a la televisión local que vincularía la aprobación de los presupuestos a una cuestión de confianza. «Hay años que puedes aceptar la prórroga de los presupuestos como mal menor, pero este 2017 no lo podíamos aceptar», ha afirmado para explicar su predisposición a someter la continuidad como alcalde a la confianza del pleno, si hubiera sido necesario.
La negociación obvia las divergencias ideológicas
Respeto a las conversaciones directas con Ciutadans y el PP para cerrar el acuerdo, Martí Carnicer ha negado que hayan topado con alguna cuestión que haya «complicado» la negociación, sino que ha garantizado que las propuestas se han tenido que «graduar» para hacerlas viables y poder llegar a un entendimiento. Según Carnicer, las divergencias en cuestiones ideológicas y políticas a nivel nacional son cuestiones que «ni tanto sólo se han puesto encima de la mesa».
A la espera de hacerse públicos los detalles económicos, este martes se han conocido cuáles son las incorporaciones más relevantes surgidas del acuerdo con C's y PP. Entre otros, hay la regularización del personal interino, racionalizar los contratos municipales, implantar la recogida selectiva a los comercios, mejorar el transporte adaptado, eliminar las aguas fecales en el barrio de Pisos Planas y instalar cámaras de vigilancia para regular el tránsito a la isla de peatones.
Un golpe anunciado el apoyo de Ciutadans y los populares, el gobierno de Vendrell se mantiene a la expectativa de qué posicionamiento adoptarán los tres regidores de Plataforma per Catalunya y la republicana Eva Mata. Si bien inicialmente habían extendido la mano a una abstención, Martí Carnicer ha dicho que no mujer por «firme» este posicionamiento, puesto que desconoce el grado de satisfacción verso las propuestas de los dos grupos incorporadas a la propuesta de presupuestos. En este sentido, no descarta que finalmente acaben decantándose hacia el voto en contra.