Calafell aprueba ceder espacios para el 1-O con la abstención del PSC, que ostenta la alcaldía
El alcalde Ramon Ferré asegura que no tendrá «ningún inconveniente» en facilitar equipamientos siempre que lo pida un organismo «oficial»
El pleno del Ayuntamiento de Calafell ha aprobado una moción presentada por CiU, ERC y la CUP donde se acuerda la cesión de espacios municipales por el referéndum previsto para el 1 de octubre. La propuesta ha prosperado gracias a los votos de los diez concejales de los grupos municipales proposants y el apoyo de los dos concejales de Unión Alternativa Municipal (UAM) Calafell -en el gobierno municipal; y del concejal no adscrito -ex de C's. Por su parte, los cinco concejales del PSC -uno de ellos el alcalde- han optado por la abstención. Al final del debate, el alcalde Ramon Ferré ha asegurado que no tendrá «ningún inconveniente» en facilitar equipamientos municipales para hacer el referéndum si la petición llega por parte de un «organismo oficial» y sin comprometer a los funcionarios. El debate de la moción se ha hecho conjuntamente con la propuesta contra el referéndum y en defensa de la legalidad vigente que había presentado el PP y que ha quedado rechazada. Cerca de un centenar de personas, que han llenado el salón de sesiones, han improvisado Los Segadores cuando se ha conocido el resultado de las votaciones.
El pleno de Calafell de este mes de julio ha estado especialmente tenso y crispado, protagonizado por el centenar de vecinos que llenaban la sala, la mayoría de ellos posicionados a favor de la celebración del referéndum. La exhibición de esteladas, aplausos ante las intervenciones de los partidos independentistas y regañadas hacia los argumentos de PP y Ciutadans han sido la dinámica constante durante la hora y media que ha durado el debate conjunto sobre las dos mociones –la que pedía ceder espacios para el 1-O y la que solicitaba justo el contrario.
La tensión en la sala ha tenido su primer momento álgido cuando una vecina ha utilizado un silbido para rechazar las intervenciones de José Manuel Tejedor, concejal de Ciutadans, y después se ha levantado para entregarle personalmente en mano, en medio del pleno. La situación ha provocado que el alcalde exigiera a esta vecina que saliera de la sala y ha amenazado al llamar a la policía si no lo hacía. Finalmente, la mujer ha abandonado el pleno mientras regañaba al alcalde.
Durante el debate, la CUP, ERC y CiU han instado reiteradamente al alcalde a «ser valiente» y cumplir los acuerdos de la moción, facilitando el uso de los equipamientos municipales como colegios electorales para el referéndum del 1 de octubre. Los tres partidos soberanistas han reprochado a Ferré el incumplimiento de acuerdos de Plenos anteriores donde se ha aprobado, por ejemplo, permitir la exhibición de esteladas en la calle y colocar los carteles conforme Calafell es un municipio adherido a la Asociación de Municipios por la Independencia (AMI).
También han posicionado claramente a favor del uso de espacios municipales como colegios electorales para el día de la consulta vinculante el concejal no adscrito –ex edil de Ciutadans-, Jesús Benedicto, y los dos concejales del grupo municipal de UAM, miembros del gobierno, que han pedido que, si es necesario, se modifique la ley para permitir la legalidad del referéndum.
Por su parte, el PP y el concejal de Ciutadans han sido los únicos que han votado en contra de la moción de las formaciones soberanistas y a favor de la moción presentada por los populares. En este último texto, el PP pedía que el ayuntamiento rechazara el «mal nombrado referéndum» y abandonara el AMI. Las dos formaciones han basado sus argumentos al despreciar el peso político del soberanismo y al subrayar la «ilegalidad» de la consulta anunciada por el presidente Puigdemont.
El debate lo ha cerrado el alcalde, Ramon Ferré, que ha estribillo la interpelación directo hecha previamente por los grupos independentistas: «Me gustaría que alguien fuera valiente y convocara este referéndum. Así todos tendríamos las cartas encima de la mesa y sabríamos a qué jugamos». Ferré ha destacado que «nadie ha enviado ninguna carta al alcalde con los términos con que se tiene que convocar el referéndum», y ha argumentado la abstención del PSC esgrimiendo que la falta de información imposibilita dar apoyo o rechazar la cesión de espacios municipales como colegios electorales.
«Como no sabemos de qué estamos hablando ni sabemos si se celebrará a pesar de haya un clamor popular que lo pida, no sabemos cómo tendremos» que «actuar», ha añadido. En este sentido, el alcalde ha apuntado que no tendrá «ningún inconveniente» al ceder espacios municipales «cuando la Junta Electoral u otro organismo oficial pida la colaboración del Ayuntamiento de Calafell». Al mismo tiempo, ha pedido explícitamente que la cesión «no comprometa los funcionarios ni trabajadores públicos».
Con la abstención de los socialistas, se mujer la circunstancia que los tres partidos del gobierno (PSC, PP y UAM) han votado de forma completamente diferente cuando ha concluido el debate sobre la cesión de espacios. Una vez se ha aprobado la moción de los partidos soberanistas, la mayoría de los vecinos que ocupaban el espacio destinado del público se han puesto de pie para cantar Els Segadors y exclamar gritos de «Independencia».