Los Mossos detuvieron el 4 de octubre a un joven de 21 por cuatro robos con fuerza y uno con violencia. El detenido es vecino de Cunit (Baix Penedès). El primer robo se produjo el 15 de agosto por la noche en Cunit, en el interior de una casa. Accedió sin forzar los accesos mientras los propietarios dormían y sustrajo dos patinetes eléctricos valorados en 800 euros. El segundo hecho se del 27 de septiembre de madrugada en un restaurante, donde forzó el bombínde una de las puertas y sustrajo la caja registradora con 400 euros y una tableta valorada en más de 700. El 29 de septiembre por la tarde se produjo el tercer robo, cuando se acercó a un grupo de jóvenes a la altura de los Horts y le exigió a un menor que le diera el patinete eléctrico.
El cuarto robo tuvo lugar el 4 de octubre en un restaurante del paseo Marítimo de Coma-ruga del Vendrell. Varias patrullas se dirigieron al lugar cuando saltó la alarma y comprobaron que el autor había accedido rompiendo uno de los cristales de la puerta principal con una piedra. Una hora después una patrulla lo localizó a la estación de Sant Vicenç de Calders, donde lo detuvieron porque coincidía plenamente con la descripción del autor de las imágenes de una cámara de seguridad.
En el registro le localizaron un teléfono móvil, bisutería, botes pequeños de pintura, un cargador de USB, mecheros y otros objetos.
Gestiones posteriores de investigación permitieron relacionar este objetos intervenidos con un robo con fuerza había cometido poco antes y aquella misma noche en el interior de un domicilio ubicado en la calle Mir i Geribert del Barrio Marítimo de Coma-ruga mientras los propietarios dormían en el interior.
El detenido, con numerosos antecedentes policiales, pasó el 6 de octubre a disposición judicial ante el juzgado en funciones de guardia de Vendrell y el juez decretó su ingreso en la prisión.
