Educación
Denuncian la «desatención» de los niños con necesidades especiales de una escuela del Vendrell por falta de cuidadores
El soporte de la única veladora del centro para atender a varios alumnos ha pasado de 25 a 20 horas semanales
Familias de la Escuela Marta Mata del Vendrell denuncian públicamente que este curso disponen de menos horas del servicio de veladora para niños con necesidades educativas especiales. Si hace un año la cuidadora trabajaba 25 horas a repartir entre todo el alumnado que lo requería, ahora son 20. Una reducción que las familias conocieron el viernes y que las ha dejado perplejas.
«Me prometieron que en esta escuela mi hijo con autismo estaría atendido toda la jornada pero sus necesidades no están cubiertas», explica la madre de un niño de I3, que critica que el niño está especialmente «desatendido» durante el rato de comedor. Las familias han empezado a recoger firmas para instar al Departament d'Educació a ampliar el servicio de cuidadores.
Sara Leyenda y Francesco Buonvensiero son padres de un alumno de Infantil 3 diagnosticado de Trastorno del Espectro Autista, con un grado 2 de dependencia reconocido. «Nuestro hijo no habla y necesita ayuda en casi todos los aspectos básicos», explican, mientras apuntan que en la Escuela Marta Mata habría cerca de 20 niños con necesidades educativas especiales que también requieren el soporte de una veladora.
Esta pareja recuerda que, a la hora de matricular a su hijo el verano pasado, el EAP (Equipo de Asesoramiento Psicopedagógico) del Baix Penedès les recomendó hacerlo en la Escuela Marta Mata porque dispone de aula SIEI (Soporte Intensivo de Escolarización Inclusiva). Francesco asegura que les garantizaron «todos los medios» para velar por la integración del niño. Ahora no comprende que les comuniquen que las horas de veladora en el centro se han reducido. «Nos sentimos engañados», lamenta.
Sara puntualiza que, de las 20 horas semanales de veladora de que dispone la escuela, hay 30 minutos diarios asignados de forma fija a una niña que requiere de una atención especial durante el rato del comedor. Quedan, pues, 17,5 horas semanales para todo el resto de alumnado que necesita el soporte de la cuidadora.
«Mi hijo sabe coger un tenedor, pero eso no quiere decir que sepa comer solo», apunta, y añade que el niño «se levanta, se marcha y no quiere probar la comida» de forma sistemática. Esta madre concluye que su hijo está «desatendido» por la falta de recursos, «ya que no hay veladora y los monitores del comedor ya no pueden hacer más de lo que hacen». Apunta que la empresa que presta el servicio de comedor prevé contratar a una monitora especializada como «parche» para completar donde no llega la cuidadora. «Pero esta no es la solución», recalca.
Francesco alaba el trabajo de los docentes, de los monitores de comedor y de la veladora, «que hacen mucho más de lo que tendrían que hacer». «Llegan a hacer favores personales para atender a los niños y niñas porque tienen vocación de cuidado de los niños», añade, mientras apunta que sienten «miedo» cuando ven que no hay los recursos suficientes para desplegar toda la atención que necesita el alumnado.
Esta familia urge el Departament d'Educació a ampliar las horas del soporte de la veladora, y reprocha a la Generalitat «que se vanaglorie de fomentar la escuela inclusiva, cuando es un proyecto que no es real». Sara resalta que «la escuela inclusiva no es tener los niños en el aula para que hagan bulto en un rincón, sino que los acompañen día a día».
Unas reflexiones que comparte otra madre con un niño de 5 años con dependencia severa y otro niño de 7 años con Síndrome de DiGorge, una enfermedad minoritaria. Esta afectada considera una «broma» los medios de qué dispone la escuela para atender a sus hijos y el resto de alumnado en situación similar «cuando hay informes médicos y de la misma Generalitat que indican que son niños que necesitan un soporte constante».
Para presionar a la Generalitat a la hora de ampliar los recursos, las familias han abierto esta semana una recogida de firmas a través de la plataforma Change.org. En dos días han reunido cerca de 500. También han pedido el apoyo del gobierno del Vendrell. Siel eco en las redes y en los medios de comunicación no da resultados, no descartan endurecer la protesta con manifestaciones en la calle.
Educación defiende el ajuste de horas pero se aviene a revisarlas
Por su parte, fuentes del Departament d'Educació consultadas por ACN apuntan que este año había asignadas un total de 15 horas semanales de veladora en la Escuela Marta Mata, pero que estas se han incrementado hasta 20 debido a las necesidades especiales de una alumna durante el rato del comedor. Con respecto a la reducción respecto las 25 horas del año pasado, Educació sostiene que la planificación se ha evaluado con el EAP «teniendo en cuenta el grado de madurez del alumnado» de un curso al otro.
Las mismas fuentes aseguran que el alumnado con necesidades educativas especiales tiene cubierta su atención gracias al aula SIEI -donde hay asignadas una maestra y un educador. Con todo, el Departament también abre la puerta a revisar la asignación de las horas de veladora con la dirección del centro «por si es necesario hacer algún ajuste». Desde la escuela, a su vez, han declinado hacer declaraciones.