La inestabilidad política frena el impulso en el apeadero de Bellissens
El gobierno reusense está pendiente de reunirse con el exectiu catalán y a la espera del nuevo gobierno español para recuperar el proyecto
Entonces, la Generalitat también se comprometió al tener terminado en un año el proyecto constructivo. Sin nuevas informaciones públicas, el PSC preguntó al último plenario reusense sobre el estado del proyecto.
«Con el anterior gobierno de la Generalitat estaba el compromiso de asumir el coste de dibujar el proyecto, previsto para el primer semestre de este año. Ahora que hay nuevo gobierno, hemos pedido una nueva reunión y esta será una de las primeras cuestiones que plantearemos, recordando este compromiso,» aseguró el concejal de Urbanismo, Marc Arza, recordando que el apeadero de Bellissens «es un proyecto que este gobierno se hace sede, que vemos viable y posible y nos gusta por el barrio y el conjunto de la ciudad» y remarcando que «lo que tenemos que hacer es estar en contacto con el gobierno de Barcelona y Madrid».
Madrid
La última palabra, sin embargo, la tiene Madrid. «A estas alturas, depende de ADIF y del Ministerio de Fomento», recordó Arza. «En noviembre tuvimos una reunión con el Secretario de Estado de Infraestrucures. Entre otras cuestiones, pusimos sobre la mesa que el proyecto saque adelante», aseguró el concejal de Urbanismo, adelantando que «cuando haya gobierno en Madrid, pediremos una reunión para recuperar la cuestión». «Obviamente, el punto clave será la negociación de los presupuestos del 2017», concluyó.
Precisamente, el alcalde de Reus y nuevo senador en Madrid, Carles Pellicer, ha registrado a una batería de preguntas en el Senado sobre cuestiones territoriales en que, entre otros, reclama dotación presupuestaria y el desarrollo del apeadero de Bellissens. El senador también tiene previsto presentar una moción al plenario del Senado, pero alertó de cómo está afectando a la inestabilidad política: «Mientras la situación sea en precario, del gobierno en funciones, si la situación es la que es, poca cosa decidiremos».
3.000 viajeros al día
La futura estación en el ámbito de Bellissens permite ampliar el acceso al transporte público de la zona sur de Reus, tanto a la población que ahora queda lejos de la estación actual como a las nuevas viviendas previstas. Además, se sitúa en una zona estratégica, de equipamientos y de actividad económica, con la Universidad Rovira i Virgili (URV), el Hospital de Sant Joan y el polígono logístico Tecnoparco.
Según el estudio hecho público ahora hace un año, el futuro apeadero requerirá una inversión de cerca de 15 millones de euros –sed para completar la vertiente puramente ferroviaria y siete más destinados al edificio propiamente decir–, ofrecerá servicio a 3.000 pasajeros diarios y hará aumentar un 100% a los usuarios del tren en la zona.
El proyecto incluye la construcción de dos andenes, una a cada lado de la vía, con marquesinas, y también del edificio de la estación y la adecuación de su entorno. También la formación de un paso inferior para comunicar los andenes, encaminamientos con rampas adaptadas a personas con la movilidad reuduïda y la mejora del paso inferior actual bajo las vías del tren. En este sentido, también se tendría que modificar la rasante de las vías actuales en una longitud de 990 metros, con el fin de encajar el nuevo equipamiento.
La existencia de apeadero y estación permitiría abrazar homogéneamente todo el núcleo urbano: el primero podría cubrir cerca de 45.000 habitantes y la segunda un total de 62.000.
Zona sur
La actual estación de Reus está situada en el norte del municipio, alejada de las zonas de crecimiento previstas al POUM. La nueva instalación ferroviaria se ubica en un punto equidistante –4,2 kilómetros– de las estaciones ferroviarias existentes de Reus y de Vila-seca, de las líneas RT1 (Reus-Tarragona), R14 (Barcelona-Lérida) y R15 (Barcelona-Riba-roja d'Ebre).
Varias entidades, como la Federación de Asociaciones de Vecinos de Reus (FAVR) y las agrupaciones vecinales de los barrios del sur están reclamando el equipamiento. De hecho, se han articulado entorno la Mesa|Tabla en defensa del Apeadero de Bellissens, a la cual se han adherido diferentes entidades e instituciones de la ciudad, desde la Cámara de Comercio, el Comité de empresa del Hospital de Sant Joan, la Universidad Rovira y Virgilio hasta diferentes entidades vecinales, tanto de Reus como de Tarragona, entre otros.