Equilibristas, payasos, acróbatas... ¡pasen y vean!
El Circ Raluy hizo parada en Reus, y el Diari Més presenciamos una de las funciones. Acompáñanos en este viaje circense!
Nos dirigimos hacia el parque Sant Jordi de Reus, que ha cambiado totalmente de aspecto porque durante 10 días alberga las instalaciones del CircRaluy. Accedemos en el recinto por la puerta de madera que han colocado en la plaza Alcalde Anton Borrell, donde ya hay algunos niños y niñas con sus padres haciendo cola para ver la actuación, aunque falta más de una hora para su inicio. Además de la carpa, dentro del recinto también hay las caravanas donde viven los artistas. En la misma puerta nos espera en Globó, el payaso ‘Carablanca’ del Raluy, que nos conduce hasta la cafetería del circo: una antigua caravana de madera, cuyo interior está abarrotado de fotografías y carteles de los inicios del circo. Allí nos sentamos en las viejas sillas mientras hablamos con Globó, que empieza a maquillarse y a prepararse para la actuación.
Este payaso, originario de Mollet pero criado en Granollers, ya llevacuatro años actuandoen el CircRaluy, aunque antes había estado en otros circos. Nos explica que actualmente el Raluy, fundado hace más de 40 años por la familia catalano-aragonesa con el mismo nombre, cuenta con casi una cincuentena de artistas, técnicos y personal de apoyo. La marca de la casa es ser un circo-museo, que traslada a los espectadores a los circos clásicos del siglo pasado, tanto porel aspecto de sus caravanas como porlas actuaciones. Un ejemplo son los propios payasos: «Actualmente somos cuatro, y representamos los roles de los payasos clásicos», explica Globó. Él mismo es el llamado payaso original o ‘Carablanca’, que usa el cinismo y el sarcasmo «con una función social muy relevante». Y es que según explica, el objetivo de la figura del payaso no es conseguir la risa fácil de los espectadores, sino hacer chistes sobre el miedo y los tabúes de la sociedad para normalizarlos. «Tratamos temas problemáticos con el fin de quitarles importancia y hacerlos más soportables», asegura. Y continúa: «La gente se está deshumanizando, y nosotros los intentamos humanizar de nuevo».
Un entorno muy internacional
Globó es catalán, pero algunos de los artistas que acoge el circo durante esta temporada vienen de Rusia y Rumanía. Es pues, un entorno muy internacional, que notamos tan pronto como Aleix, estudiantede magia que está deprácticas en el mismo circo, nos conduce hacia el interior de la carpa. En el backstage, justo detrásdel escenario y dondeestiranlos artistas antes de empezar el espectáculo, hayuno de los payasos, proveniente de Rusia, y uno de los equilibristas, que tan sólo hablan inglés. Pero eso no es problema parael resto de artistas, que además de la lengua materna dominan el inglés a la perfección. Después de eso vamos a dar una vueltaentre las caravanas, todas ellas vehículos antiguos totalmente restaurados y que podrían ser piezas de museo.
Ya se acerca el inicio de la actuación, y los espectadores empiezan a entrar. Las 750 plazas de la gradería se llenan rápidamente, y tanto grandes comopequeños esperan con ansia el inicio de la función. Volvemos al backstage, dondelas primerasenactuar, las hermanas Niedziela y Emily Raluy, ya están calentando. Nidziela fue concursante de la decimosexta edición del reality show GranHermano, quedándose en las puertas de la final, y actualmente es una de las artistas que atrae más fans en el circo. Las luces se apagan, los espectadores callan y empieza la función. Globó y su compañerosalen al escenario y todo el mundo se prepara para empezar a disfrutar del espectáculo.