La sede de la Seguridad Social tramita la licencia después de 2 años cerrada
El edificio, acabado desde 2014 en la Plaça Gandhi, requerirá obras por valor de 50.000 euros para estrenarse
Desde la Subdelegación del Gobierno calificaban, meses atrás, estas actuaciones adicionales como «actuaciones necesarias de puesta en marcha y apertura», y recordaban que en toda obra pública pueden aparecer trabajos sobrevenidos. Atribuien también el retraso en la entrada en funcionamiento del nuevo inmueble al margen para completar trámites pendientes, entre los cuales estaría ahora la obtención de la licencia de actividades. En la PlaçaGandhi, entre otros, se ubicará el Centro de Atención e Información de la Seguridad Social y la Unidad de Recaudación Ejecutiva. La construcción cuenta con dos núcleos de escalera, dos de ascensores –en total cuatro elevadores paramoverse entre las diferentes plantas– y dos de lavabos para mantener una parte separada para los trabajadores y otra abierta al público. También incluye una zona de parking exterior, probablemente destinada al personal, y una zona ajardinada y visible a través de los vidrieros que cierran la construcción por ambos lados. El equipamiento había alcanzado el 100% de operatividad, según las mismas fuentes, todavía hacia enero de 2015, y en su interior se podía apreciar entonces la presencia de muebles y elementos de trabajo ya dispuestos.
Los «últimos flequillos»
El proyecto había sido adjudicado inicialmente, hacia el verano del 2011, a la madrileña Castilla de Construcciones ABS S. A. con un presupuesto aproximado de 3,9 millones de euros que quedaba entonces muy por debajo de la cantidad prevista en un primer momento. A mediados del 2013, el edificio ya presentaba un aspecto sólido con los recubrimientos de la estructura y las ventanas. Al principio del 2014, la retirada de las vallas de protección que rodeaban el perímetro sirvió para poner punto y final en los trabajos de construcción que se ejecutaban ya únicamente en su interior, y que concluyeron a mediados de año una vez cubiertos todos los detalles de los trabajos. La constructora entregó la obra en febrero, y desde entonces se ha seguido trabajando en «los últimos flequillos».