Unos 75 municipios y entidades en el territorio quieren reanudar la Estación Intermodal

Cerca de nueve meses después de que elaborara e hiciera público el llamado Manifiesto para la reactivación del proyecto de construcción de la Estación Intermodal Central del Camp, un documento con que perseguía obtener «el máximo número de adhesiones para reclamar la reactivación de una infraestructura básica para la competitividad de las empresas y la calidad de vida de los ciudadanos», la Cambra de Reus ha captado el apoyo de hasta 75 municipios, instituciones y entidades vinculadas al territorio con el objetivo común de «disponer de una estación estratégica las obras por|para la cual ya hace años que se aprobó la adjudicación». Entre estas 75 adhesiones, que incluyen tan relevantes como los de los ayuntamientos de Reus, Salou, Vila-seca y Montblanc, y los Consejos Comarcales del Tarragonès y del Baix Camp, hay también, como más recientes, «entidades de ámbito ciudadano y comarcal», tal como detallan fuentes de la Cambra. El mismo nos se encuentra en este momento a la espera de que se forme un nuevo gobierno central para «poder trasladar nuestra reivindicación al nuevo ministro de Fomento».

A pesar de reconocer que «no esperábamos que la situación de interinaje –del gobierno en Madrid– se mantuviera tantos días», las mismas fuentes subrayan que «en todo caso, la Cambra mantiene esta reivindicación intacta». Coincidiendo con el 130º aniversario de la corporación, que tendrá lugar este próximo otoño, la Cámara ha previsto la celebración de un acto, cuya concreción todavía no se ha desvelado, y que servirá también para «recordar la petición de reactivación de la Estación Intermodal». La infraestructura fue adjudicada el año 2009 por cerca de 54 millones de euros y con un compromiso de inicio de las obras en el 2010 y de finalización en el 2012. La construcción, al término municipal de Reus y que tenía que unir el sur del Aeropuerto con el Corredor del Mediterráneo, está actualmente paralizada –como lo ha estado en los últimos seis años, aproximadamente–, dada la actual situación económica, su proximidad a la estación del Camp de Tarragona y el elevado coste.

La actuación inicial contemplaba la construcción del edificio, las vías, las marquesinas y los andenes, en más de dos aparcamientos y las conexiones por carretera con la T-11 y las ciudades de Reus y Tarragona. En total, se tenían que edificar 56.000 metros cuadrados y se preveía que la Estación Intermodal, que se dibujó en el cruce entre el AP-7 y la T-11. diera servicio a un millón de personas anualmente, al doble de la Estación del Camp.

La ejecución no se ha desprogramado

Al manifiesto difundido en noviembre, la Cambra incluía tres puntos especialmente relevantes: en primer lugar, la petición que se afiancés el compromiso para garantizar la construcción de la Estación Intermodal; en segundo, una solicitud de información en el Ministerio de Fomento sobre la situación real del proyecto y sus plazos de ejecución; y, para acabar, el texto pedía que se valorara, si era el caso, la redefinición del proyecto y su adaptación a la situación económica. Mediante una carta al presidente de la Cambra de Reus, Isaac Sanromà, el Secretario de Estado de Infraestructures, Transporte y Vivienda, Julio Gómez-Pomar, respondió el pasado mes de marzo que la Estación Intermodal en ningún momento se ha desprogramado y su ejecución «se podrá reanudar tan pronto como la sostenibilidad económica y la demanda estén plenamente garantizadas». En la misiva, Gómez-Pomar destacaba que, en la anterior legislatura, el Ministerio apostó por implantar una solución por el Corredor Mediterráneo que fuera viable adaptando el calendario «a la realidad de los operadores».