Errores en la detección de los coches obligan a apagar los sensores de la Riera Miró de Reus

La zona azul de la Riera Miró apagará los sensores que indican la ocupación o no de las plazas y el cartel que anuncia la disponibilidad. El Ayuntamiento ha decidido desconectar el sistema después de percibir «errores puntuales en la detección de vehículos» y, a lo largo de las próximas semanas, ejecutará mejoras en un smart lab que fue pionero en el municipio. En detalle, los trabajos previstos incluyen la «renovación de algunos sensores para minimizar el margen de error y al mismo tiempo hacerlos más resistentes» y la adecuación de todo el mecanismo con el fin de poder volver a encender los indicativos que facilitan el uso del aparcamiento a los conductores una vez resueltos los problemas. La previsión, tal como apuntan fuentes municipales, es que las obras estén terminadas en la primera quincena de noviembre.

El espacio destinado al estacionamiento de vehículos pasó a ser smart el año 2014, en una transformación que comportaba la inversión de 60.000 euros en el área de zona azul más utilizada en aquel momento. La implementación de aplicaciones inteligentes en el aparcamiento comportó la instalación de un protocolo de detección de laocupación plaza a plaza, a través de sensores colocados bajo el pavimento: unos elementos soterrados interconectados en una unidad de control que centraliza la información. Son estos sensores los que se mejorarán ahora con el fin de garantizar el correcto funcionamiento de la zona de la Riera Miró, que también cuenta con pantallas informativas en los dos accesos y parquímetros adaptados a la telegestión.

Más allá de estas obras, una empresa externa reparará los daños que la semana pasada se produjeron al muro de uno de los accesos a la zona azul, del cual se desprendieron partes que permanecían en el suelo y acordonadas por la Guardia Urbana desde entonces.

Los vehículos eléctricos

Aprovechando la sustitución prevista del equipo existente de carga semi rápida por uno de nuevo con el sistema ultra rápido mediante la subvención del ICAEN y que fue presentada en Reus hace unas semanas, y «siguiendo las indicaciones que nos han hecho llegar los usuarios de la red de electrolineras eléctrica», según explican las mismas fuentes, se ha procedido a la reubicación del equipo de carga eléctrica de vehículos situándolo en las plazas de aparcamiento en batería, «facilitando así la carga a los vehículos independientemente de dónde tengan ubicada la electrolinera». Reus cuenta con un parque de 18 electrolineras en un total de 10 ubicaciones diferentes –8 en parkings municipales y 2 en superficie–, y que pueden atender hasta 26 vehículos simultáneamente.