El Centro de Alzhéimer explora nuevas vías para instalarse en una nueva sede
La Asociación dice que el Ayuntamiento se ha desentendido y esperan soluciones; mientras tanto, buscan el apoyo de las entidades
La ubicación del futuro nuevo local del Centro de Alzhéimer de Reus y el Baix Camp toma un nuevo cariz después de ver cómo «no nos ofrecen ninguna solución al problema» desde el consistorio: «creemos que hay un desinterés para que nos puedan ofrecer una alternativa real». Por eso, según explica la presidenta de la Asociación de Alzhéimer de Reus y Baix Camp, Maria Teresa Besora, «hemos decidido movernos también por nuestra cuenta y buscar otras alternativas». En este sentido, explican que mantienen conversas con entidades de la ciudad para poder acordar la cesión de algún espacio, aunque todavía no se ha materializado ninguna operación al respecto. Una de las fórmulas pasaría por un alquiler social, y tampoco descartan hablar con entidades bancarias para buscar la posibilidad de encontrar el local ideal.
Desde la Asociación de Alzhéimer reiteran que «nosotros asumiremos y pagaremos el alquiler allí donde vamos y queremos dejar claro que no dejaremos de atender a las personas». El Centro no descarta aunque el consistorio pueda reanudar los contactos para encontrar un nuevo local, aunque «hace meses que teníamos acordada una reunión con Bienestar Social y no se llevó a cabo; desde entonces, estamos esperando movimientos por parte del consistorio que vemos que no llegan y eso sólo hace que generar desconfianza», afirma Besora, quien también recuerda que «las otras formaciones políticas se comprometieron también a ofrecernos su ayuda», tal como quedó reflejado en el plenario municipal del pasado 3 de junio cuando se aprobó una propuesta de resolución por dotar de un nuevo espacio a esta entidad.
«Necesidades realistas»
El Centro de día de Alzheimer había pedido al consistorio que el emplazamiento del local se adaptara a las necesidades «realistas» de la entidad, ya que las propuestas que los habían ofrecido no satisfacen las expectativas o bien «las han desestimado ya de entrada». La entidad explicó que una de las soluciones que les había ofrecido el consistorio era la de ocupar un local de propiedad municipal situado en la calle de Sant Celestí, de 900 metros cuadrados, al lado del parking Ferran, que se encuentra sin ningún uso y el cual habría que habilitar. El problema, según explicaba entonces su presidenta, es que «no tiene salida exterior como un jardín» y eso supone un problema «ya de entrada». Además, explicaba que «no dispone de iluminación suficiente y es como un túnel», añadiendo que ya habían manifestado la negativa a la concejala de Bienestar Social.
Atres propuestas que se habían puesto sobre la mesa serían ocupar el edificio de la antigua Escuela Rubió y Oros, próximo a la Riera de Miró, un edificio que desde 1994 hasta el 2010 acogió el Archivo Municipal de Reus y actualmente es uno de los edificios donde se guarda material del Archivo Comarcal del Baix Camp. La entidad reclama desde hace meses un cambio de la ubicación del local que dé respuesta a la «falta de espacio» en el local situado actualmente en la carretera de Castellvell.