El Ayuntamiento de Reus paga facturas de sus proveedores 36 días antes que en el 2016
El plazo pasa de los 55 a los 20 días y se ubica por debajo de la recomendación del Estado, que está en un mes; el año 2012 los recibos se cobraban a los 176
Entre en noviembre del 2015 y el mismo mes del año pasado, el plazo medio de pago a proveedores del Ayuntamiento de Reus ha pasado de 55,39 a 19,78 días. Una reducción, esta, próxima a los 36 días y que coloca definitivamente el municipio por debajo de las cifras recomendadas por el Estado en este ámbito, que fija el umbral en el margen máximo de un mes. Con respecto al 2014, la rebaja en el tiempo de satisfacción de las deudas comerciales es de más del 50% y, recuperando datos de periodos anteriores, como el del 2012 cuando el indicador se situó en los 176, friega ya los 160 días. La estadística ubica igualmente Reus por debajo de la media catalana, próxima a los 32 días según datos del Departamento de Economía.
El concejal de Hacienda, Joaquim Enrech, hace un balance positivo de la situación y apunta que «los datos confirman el compromiso del gobierno de Reus de reducir sustancialmente y de manera continuada y progresivamente los plazos» en el pago a proveedores. De hecho, a lo largo de todo en el 2016, y hasta noviembre –en la última certificación hecha pública por el Ministeri d'Hisenda, pendiente todavía de cerrar el año–, el Ayuntamiento de Reus únicamente superó el tope de los 30 días en tres meses: enero, febrero y abril. En el resto, se mantuvo siempre por debajo de los 22 y en julio –posiblemente en parte por el volumen de las cantidades a abonar– ocurrió el periodo con una media más baja, de 12,27 días. En mayo dejó unos registros de 13,34 días y el mes de junio, la media de 14,53 días.
Un «impulso a la actividad»
Enrech puntualiza que el acortamiento en la cantidad de días que los proveedores del Ayuntamiento tardan al cobrar las facturas por los servicios realizados es «una medida de impulso a la actividad económica que estamos alcanzando gracias a una política de contención del gasto». El concejal de Hacienda valora que esta política «está siendo llevada a cabo con rigor y de acuerdo con unos criterios de gestión presupuestaria que han priorizado las necesidades reales de la ciudad».
Con respecto a otro de los indicadores, el Ayuntamiento ha despedido en el 2016 con una ratio de endeudamiento aproximada del 57,46%, según los datos facilitados por el propio consistorio en la presentación del estudio de oportunidades del servicio de limpieza vial y recogida de residuos urbanos. En el 2015, la cifra fue similar, del 55,23% y culminaba toda una tendencia de al menos cinco años consecutivos a la baja.
En relación en el escenario económico, el gobierno se encuentra ahora en fase de negociación con el resto de Grupos Municipales a la busca de un acuerdo que propicie la aprobación de los presupuestos del 2017, y con los del 2016 provisionalmente prorrogados desde principios de enero.