El Hospital de Reus dice que la mujer en lista de espera «no se quiso operar»

El Hospital de Sant Joan sale al paso de la denuncia pública de la paciente que se tenía que operar de un desplazamiento de vértebra el año pasado y que «la sacaron de la lista de espera» donde figuraba desde 2014. Fuentes del centro hospitalario afirman que se sacó a Montse Puig Ribas del listado donde figuraba desde el 27 de julio hace cerca de tres años porque «no se tenía decidido si se quería intervenir y sólo se hizo una de las pruebas del preoperatorio, en marzo de 2016», sin especificar de cuál se trataba concretamente. Según explican desde el Sant Joan, fue entonces cuando «se la sacó del listado y se la volvió a incluir el 23 de junio de 2016, después del resultados de una resonancia y de la visita a la traumatóloga, el 10 de junio».

En este sentido, desde el centro hospitalario comentan que «para que un paciente sea dado de baja tiene que haber un motivo razonado; y en este caso si la paciente dice que no, se procede a la baja». La versión que ofrece el Hospital de Sant Joan la desmiente rotundamente el marido de la paciente, Andreu Ferré. «Mienten cuando dicen que ella renunció a la operación; espera desde hace dos años la intervención y se hizo las pruebas pertinentes al mes de marzo», entre las cuales estaba el análisis de sangre, reiterando que no tuvieron conocimiento que había sido borrada de la lista de espera hasta que los lo comunicó la doctora en la visita del 23 de mayo.

Un nuevo preoperatorio

Según afirman desde el Sant Joan, la mujer se sometió a un nuevo preoperatorio el pasado de 23 de enero, un hecho que tanto Ferré como su mujer dicen que no ha sido a instancias del personal médico sino «por una recomendación que nos hizo la administrativa del Hospital, que instó a que lo hiciera por si se daba la circunstancia que había una baja y le pudiera ser adelantada la intervención». Precisamente, sobre los plazos de la operación, el marido de Puig reitera que ahora «todavía desconocemos cuándo será la operación, a diferencia de la vez anterior» y «no sabemos si ha pasado a la cola del listado». Así, especifica que, debido a la dolència que sufre su mujer, la única vía posible es la de la operación. En este sentido, desde el Sant Joan argumentan que la prioridad de la intervención está sujeta a la visita que la mujer tiene fijada para el próximo 24 de febrero. La mujer empezó a quejarse de mal en la columna en el 2009. Le fue ser diagnosticada una estenosis de canal segmentario, con un desplazamiento de la vértebra que presiona la médula espinal y provoca dolores agudos en la espalda y a las piernas hasta los pies.

«Creemos que el hecho de sacarla de la lista de espera ha sido una decisión que el Hospital ha hecho por su cuenta», ya que «si fuera cierto que mi mujer renunció a la operación queremos que nos enseñen un documento firmado donde conste su renuncia», argumenta Ferré. «Hace más de 900 días que esperamos una solución que arrastramos desde el año 2014», concluye al marido.