Piden 38 años de prisión y acaban pactando 2 por agredir a su mujer y amenazar de muerte a dos familiares
El hombre encerró a las víctimas con llave dentro del domicilio, donde también había su hija menor
Un año de prisión para llevarse los electrodomésticos del piso antes de que lo desahuciaran
Un hombre ha aceptado una pena de casi dos años de prisión por agredir a su mujer con un cuchillo y amenazar de muerte dos familiares en presencia de una menor. Los hechos tuvieron lugar en junio del 2014 en un piso de la avenida del Doctor Vilaseca de Reus. Según la sentencia, después de cerrar la puerta con llave, V.O. propinó un navajazo en la mano de su pareja y la cogió del pelo. Posteriormente amenazó las dos familiares con matarlas si llamaban a la policía. Aunque la Fiscalía quería pedir 38 años de prisión por el acusado, las partes llegaron a un acuerdo de conformidad por el cual la Audiencia de Tarragona lo ha condenado a 23 meses de prisión por dos delitos de coacciones, una de lesiones, una de amenazas y uno de maltrato -por haber balanceado a la menor mientras lo cogía por los pies-, con el atenuante de consumo de alcohol. Por el contrario, ha quedado absuelto de agresión sexual y de detención ilegal. El hombre no podrá acudir a Reus durante un periodo de tres años y medio.
Durante el juicio, celebrado en noviembre, las partes llegaron a un acuerdo que ha evitado que el hombre tenga que volver al centro penitenciario. El individuo, de nacionalidad yugoslava, ya estuvo en prisión provisional durante 23 meses -la misma condena que le ha impuesto ahora la Audiencia de Tarragona-, del 30 de junio del 2014 al 2 de mayo del 2016.
Según la sentencia, el condenado, V.O., reanudó en marzo del 2014 una relación con una vecina de Reus con quien tenía una hija en común. La madrugada del 27 de junio de aquel año, después de haber llamado en varias ocasiones a la mujer y habiendo consumido una gran cantidad de alcohol, se personó en el domicilio donde convivían y empezó a llamar en la puerta hasta conseguir que lo abrieran.
Una vez dentro del inmueble, colocó un mueble zapatero delante de la puerta y la cerró con llave para impedir la salida de las personas que había: su pareja, la cuñada, la suegra y la hija menor. Seguidamente, sacó un cuchillo del bolsillo, cogió del pelo a su compañera y le propinó un navajazo en la mano izquierda ocasionándole un corte profundo.
A continuación, manteniendo a la mujer cogida del pelo y esgrimiendo el cuchillo en la mano, entró en la habitación de la cuñada, la tiró en la cama, y después fue a la habitación de la suegra, las señaló a las dos con el cuchillo y les dijo «si llamáis a alguien o a la policía, os mato a las tres».
Seguidamente, el individuo se dirigió al comedor donde había la menor. Allí, la balanceó cogiéndola de los pies y la dejó de nuevo donde se encontraba. Sobre las siete de la mañana, la cuñada salió a comprar tabaco y todas las víctimas pudieron salir de la vivienda a excepción del hombre.
El tribunal ha considerado probados dos delitos de coacciones, un delito de lesiones con instrumento peligroso, un delito de amenazas en domicilio común y en presencia de menores y un delito de maltrato en el ámbito familiar. Los magistrados han apreciado la concurrencia de una circunstancia eximente incompleta por consumo de alcohol.
Por otra parte, la Audiencia de Tarragona ha absuelto V.O. de los delitos de detención ilegal y de agresión sexual de que había sido acusado. Según la sentencia, no consta que hubiera mantenido relaciones sexuales no consentidas con su pareja.
Las penas impuestas suman un total de 23 meses de prisión. Además, el hombre tendrá que cumplir varias medidas de alejamiento y de prohibición de comunicación con las cuatro víctimas, durante un periodo que oscila entre los cinco y los seis años. Tampoco podrá acudir a la ciudad de Reus durante tres años y medio.
