El Ayuntamiento de Reus sacará a licitación pública el Estadi Municipal por 25 años y 6 millones de euros

El Estadi Municipal de Reus pasará a manos de un privado en junio, en formato de concesión por un periodo de 25 años prorrogable hasta el 2057, con un canon de 6 millones de euros que el Ayuntamiento cobrará por tramos anuales de entre 220.000 y 250.000 euros, y bajo la obligación que el concesionario realice mejoras por valor de 3 millones. La operación de desvinculación del derecho de uso y gestión del campo, que está pendiente de comisión informativa y espera luz verde del pleno el 23 de marzo, se llevará a cabo mediante un proceso público de licitación que contempla que cualquiera que se ajuste a los requerimientos del pliego de condiciones puede concurrir.

Es decir, que el Estadi no tiene por qué ir a parar a la SAD del CF Reus de Segunda que compite habitualmente si algún otro club, o una empresa o sociedad, presenta una oferta más ventajosa según los criterios que establezcan las bases de la licitación, los cuales no han trascendido todavía pero que «en ningún momento favorecen a nadie ni están hechos a medida para nadie», en palabras del alcalde de Reus, Carles Pellicer. Si este extremo se diera, aunque no es probable, y el CF Reus tuviera que abandonar su feudo dentro de tres meses, «se tendría que buscar alguna fórmula alternativa» para que el club continuara su actividad, que ahora mismo tampoco está esbozada.

Eso sí, la inversión que la entidad rojinegra ya ha realizado en estos últimos meses, de su bolsillo, para habilitar dos nuevos campos de entrenamiento en las instalaciones del Estadi, el CF Reus la perdería y los campos pasarían a ser, también, municipales sin ninguna contraprestación por parte del Ayuntamiento. El proceso mantiene el mismo Ayuntamiento de Reus como propietario del Estadio y se limita a concessionar el uso y la gestión, pero no la propiedad, que sigue siendo municipal en todos los casos. Con todo, quién acceda, lo hará bajo el compromiso legal de ampliar el aforo hasta los 6.000 espectadores –hoy, la capacidad del campo es de 4.200–, la construcción de 4 vestuarios más y de una unidad de control policial, el cierre perimetral de total la finca y, en resumen, la aplicación del paquete de medidas y reformas para la adaptación del complejo a la normativa de la Liga de Fútbol Profesional (LFP).

Estas mejoras, que son las valoradas en los 3 millones de euros que se tiene que dejar el concesionario, se ejecutarían en dos bloques: uno de primero con el plazo que establece la LFP –el CF Reus compite sin completar los requisitos, dado que ascendió a Segunda la temporada pasada y que se establecen dos de margen para estas cuestiones– y uno de según, aunque puede ser paralelo, deja 5 años de plazo. Las inversiones quedarán a beneficio del Ayuntamiento al acabar la concesión.

Un ahorro de 450.000 euros

El resto de compromisos pasan por mantener el nombre de «Estadi Municipal» y reservar para el Ayuntamiento el derecho de utilización para acontecimientos puntuales y también espacios publicitarios para campañas las institucionales. La licitación da prioridad a las propuestas que establezcan programas sociales de atención en la infancia, acciones de promoción del fútbol femenino y programas de formación en las escuelas de la ciudad. Los 6 millones de canon se pueden abonar hasta un 95% a través de inversiones a las instalaciones pero el 5% restante se tiene que pagar «en cash». La concesión, tal como apuntaba el alcalde, supondrá, además de los ingresos del canon, el «ahorro de 450.000 euros anuales que se pagaban por el mantenimiento» de las instalaciones y está orientado «a la adaptación al fútbol profesional. El Ayuntamiento, en este momento, ni podía ni quería hacer una inversión de estas dimensiones para adaptar el campo».

El CF Reus celebra el paso adelante

Por su parte, desde el CF Reus, celebraban ayer el paso adelante en la licitación del Estadio y confirmaban que la SAD se presentará al concurso público. El presidente del club rojinegro, Xavier Llastarri, calificaba esta como «una buena noticia», también por la celeridad con que se han hecho los trámites para iniciar todo el proceso que desembocará en la concesión de las instalaciones en uno privado.

«Soluciones» para el rugby

Horas antes que se diera a conocer la licitación, la CUP había reclamado al gobierno, en una rueda de prensa y a través del concejal Oriol Ciurana, una «solución» para el Reus Deportiu de rugby que, con la concesión, perderá definitivamente el campo donde hasta ahora había estado compitiendo.