La mezquita de Reus se abre a la ciudad y se hace un lugar en el tejido asociativo

La mezquita As-sunnah y la junta que la gestiona han intensificado, en las últimas semanas, las acciones para fortalecer los vínculos del centro de culto y la comunidad que hace uso con el resto de entidades e instituciones de la ciudad. Múltiples encuentros mantenidos con representantes de la corporación municipal, de los cuerpos de seguridad o del gobierno catalán, y la organización de ponencias o la incorporación del colectivo en el Plan Comunitario del barrio Gaudí son los ejemplos recientes de una voluntad que la misma junta había hecho pública reiteradamente en los últimos tiempos y que ahora visibiliza, también a través de las redes sociales.

El portavoz de la Asociación Cultural de los Musulmanes de Reus y Comarca, la cual conduce la mezquita, Mohamed Said Badaoui, explicaba en la introducción de una de estas charlas, pronunciada en el Centro de Lectura, con la presencia del profesor de la URV Jordi Moreras y orientada a analizar la situación del Islam en Cataluña, que «la buena comunicación, el respeto y la ayuda mutua son necesarios para que una sociedad avance y mejore para el beneficio común». Apuntaba, al mismo tiempo, que «no se puede obviar que la relación con la comunidad musulmana formada por familias inmigrantes ha estado siempre un poco tensa. Ahora lideran el colectivo jóvenes de una segunda generación que han heredado la condición de inmigrantes cuando realmente ya no lo son». Y hablaba en el auditorio, en unas declaraciones que el propio colectivo ha difundido también en formato vídeo a través de sus perfiles, de la experiencia propia: «Yo mismo podría ser ejemplo. Nací en Marruecos y vivo en Cataluña desde los 10 años. Tengo un origen y una cultura de la cual no reniego y al mismo tiempo he asimilado la manera de entender la vida del país que me ha visto crecer. Practico la religión musulmana la cual me ha acompañado siempre». «Eso se dice construirse una identidad propia y es un proceso que vivimos a menudo aquellas personas que somos de allí y somos de ningún sitio. Me siento afortunado poder ver el mundo a través de dos perspectivas tan diferentes y ricas porque entender quién somos es la única manera de afrontar los retos diarios. Pero no es fácil».

La diversidad «no es problema»

«Tenemos que ayudar a las nuevas generaciones a entender su contexto como la parte de una sociedad misma y diversa y tenemos que fomentar su participación en su desarrollo de su entorno», proseguía Mohamed Said Badaoui. Por eso, en los últimos tiempos, As-sunnah ha estado presente en la Semana Mundial de la Armonía Interconfesional celebrada en Barcelona, ha visitado al cónsul del Marruecos en el territorio, el concejal de urbanismo y el alcalde de Reus, y ha recibido en la mezquita a las concejalas de salud y participación, miembros de casi todos los Grupos Municipales y cargos de los Mossos D'Esquadra, entre otros. Desde las instalaciones en la calle Tolerancia del polígono Granja Villa, las únicas con autorización para acoger el culto islámico en este momento, se han impulsado iniciativas solidarias o la junta se ha integrado con otros que proponía Reus, como la del reaprovechamiento alimenticio.

Todo porque, tal como lo entienden desde la mezquita, «Cataluña tiene la posibilidad de evitar los errores que se han producido en otros estados. Estamos a tiempo de hacer que la diversidad cultural y religiosa no sea percibida como una fuente de problemas sino como un patrimonio inherente a nuestra sociedad que hay que defender. Y en esta defensa hace falta que nos impliquemos todos». Actividades como las que ha organizado o de las que ha tomado parte la mezquita de Reus quieren servir para «iniciar una nueva relación entre nosotros», concluía al portavoz Mohamed Said Badaoui en su intervención en el Centro de Lectura.

Ampliar el espacio para actividades

En los próximos meses, la mezquita As-sunnah, la única que se mantiene activa en la ciudad, ganará cerca de 400 metros cuadrados para ampliar el espacio que se destina a actividades y separarlo de la zona de oración. La Asociación Cultural de Musulmanes de Reus y Comarca inició, en julio, los trámites administrativos para conectar la nave que acoge actualmente la mezquita con una de segunda, a tocar y en la misma calle Tolerancia, que adquirió el año 2015. A lo largo de este tiempo, y con el acompañamiento de los servicios que Urbanismo ofrece a la ciudadanía, el colectivo ha estado recopilando la información y preparando tanto la adecuación a la normativa vigente como la adaptación a los requisitos que plantea una obra de sus características en el espacio del polígono Granja Villa.