Padres e hijos comparten los últimos metros de Olimpiada Escolar
Un cross familiar ha cerrado la 35ª edición de la cita, con unos 3.000 niños
«Ha sido una Olimpiada donde ha disfrutado mucho a la familia, los niños se han iniciado en el deporte y han vivido quince días de muchas sensaciones». Es el balance que hace el concejal de Deportes, Jordi Cervera, de la 35ª Olimpiada Escolar de Reus, que este año estrenaba como «un éxito» el tenis y los bolos catalanes y que este domingo ha puesto el punto final con un cross «espectacular en participación y valores», que también era novedad y que ha permitido la participación conjunta de padres e hijos en los últimos metros.
Cerca de 3.000 participantes, procedentes de 43 centros educativos –36 del Bajo Camp-, han participado en esta edición de la Olimpiada, que del 3 al 26 de marzo ha llenado de actividades las diferentes sedes. Un año más, la competición estaba reservada para las categorías alevín y benjamín. Cervera ha destacado, este domingo, también la implicación y el buen acuerdo entre todos los actores que han hecho posible la segunda edición de la cita y ha puesto también el acento en «el juego limpio» de los más pequeños, que han potenciado valores como «la solidaridad y el espíritu del deporte».
Tres semanas de deporte
Esta edición, de manera consensuada con un amplio sector de la comunidad educativa, ha movido las fechas con el fin de celebrar la competición antes de las vacaciones de Semana Santa. La Olimpiada, que se consolida en el formato de 3 semanas, ha vivido su desenlace en una matinal festiva y lúdica en el parque del Roquís, un emplazamiento que también se estrenaba y que ha servido para «acabar de disfrutar de lo que nos da la Olimpiada».