La URV busca voluntarios con síndrome metabólico para seguir una dieta saludable
Los investigadores evaluarán si una alimentación saludable modifica las bacterias intestinales y su función
Investigadores de la Universitat Rovira i Virgili buscan 40 voluntarios que tengan síndrome metabólico para participar en un estudio que pretende evaluar si la intervención nutricional con alimentos saludables modifica los tipos de bacterias intestinales y su función, y de qué manera eso mejora determinados parámetros de riesgo metabólico como la glucosa o el colesterol, entre otros. Para poder participar, las personas tienen que seguir tres o más de los siguientes: obesidad abdominal, glucosa alterada, colesterol elevado, triglicéridos elevados y/o hipertensión.
El estudio lo llevarán a cabo investigadores del grupo de Recerca en Nutrició Humana de la Universitat Rovira i Virgili (URV), l’Institut d’Investigació Sanitària Pere Virgili (IISPV), CIBER Fisiopatologia de l’Obesitat i l’Hospital Universitari Sant Joan de Reus. En los últimos años, las bacterias que viven en el trato digestivo han tomado un protagonismo clave en la investigación por la salud. Hoy en día se sabe que algunos tipos de bacterias pueden tener un papel relevante en patologías como la obesidad, la diabetes o las enfermedades cardiovasculares. Es por eso que tener una flora bacteriana saludable es una estrategia para el mantenimiento de la salud. El estudio someterá a los voluntarios al seguimiento de una dieta saludable para valorar la afectación de ésta.
Este proyecto de investigación, que lleva por nombre Metadiet, ha obtenido financiación del Instituto de Salud Carlos III y se desarrollará durante tres años. La fase de intervención nutricional se inició durante el mes de marzo y pretende incluir a un total de 40 participantes, a los cuales se les darán recomendaciones de dieta saludable durante dos meses. Posteriormente, los mismos participantes estarán dos meses más siguiendo una dieta mediterránea con frutos secos que se facilitan al participante. Durante este tiempo, los participantes estarán con seguimiento nutricional y de estilo de vida, además de realizarse análisis sanguíneos con el fin de valorar los marcadores de riesgo metabólico.