Huellas rojas para denunciar espacios que sostienen la violencia machista
Una campaña a nivel de Cataluña de la Esquerra Independentista acusa a comercios e iglesias de ser «responsables» de los feminicidios
Algunos establecimientos e iglesias de Reus se han despertado, esta mañana, con huellas de color rojo delante de sus puertas. Este es el caso de la Parròquia de Sant Joan Baptista, de la tienda Calzedonia de la calle Llovera y del establecimiento de depilación de la calle Sant Joan Laser 2000, entre otros. Estas micro-acciones forman parte de una campaña de la Esquerra Independentista a nivel nacional que denuncia la violencia machista y los feminicidios. De este modo, los grupos quieren señalar públicamente mediante las huellas, aquellos espacios «que son sujetadores de esta violencia».
Las huellas en iglesias hacen referencia a «cómo atacan el derecho de la mujer a su propio cuerpo»; las puestas ante franquicias de tiendas de ropa, a «cómo perpetúan la presión estética»; con respecto a las situadas en clínicas estéticas, a «cómo fomentan falsas necesidades y bajan la autoestima». Miembros de Arran, Endavant y CUP, que participan en esta campaña que lleva el nombre de 'Prou feminicidis', han pintado huellas en establecimientos de 40 municipios de Cataluña. Además de los ya mencionados, también han situado en discotecas y salas de baile «que cosifican a la mujer y la presentan como un mero reclamo sexual», y en sedes del Partit Popular, «principal impulsor de las políticas reaccionarias y machistas en las instituciones del Estado español», entre otros.
Durante la mañana de este martes también ha tenido lugar, en Barcelona, una rueda de prensa para seguir denunciando los feminicidios y continuar con la campaña. Según ha explicado Mar Ampurdanès, miembro de Arran, «iniciamos ahora y desde todas las organizaciones de la izquierda independentista una dinámica de trabajo conjunto con el objetivo de denunciar los feminicidios y combatir las causas». Asimismo, la activista de Endavant, Laura Borràs, ha apuntado que «los feminicidios son la parte más visible de las violencias que sufrimos las mujeres, la punta del iceberg de un sistema de violencia invisibilizado. Una violencia que consideramos estructural y funcional del sistema capitalista-patriarcal. Y ha concluido: «Es por eso que queremos señalar todos los responsables y sujetadores de este patriarcado capitalista». Asimismo, la concejala de la CUP en Barcelona, Maria Rovira, ha explicado que sólo el año pasado 2016 hubo 36 feminicidios en Cataluña.
La campaña contra los feminicidios continuará centrada en la denuncia de la cosificación de la mujer y las agresiones cometidas en el ocio nocturno para, después del verano, visibilizar la violencia en la educación como la violencia institucional.