La fiscalía pide 10 años de prisión para el exalcalde de Reus, Lluís Miquel Pérez, por el caso Innova
La acusación pública también solicita penas de entre 7 y 10 años para el expresidente del ICS Josep Prat; el exdirector del CatSalut; Carles Manté y el arquitecto Jorge Batesteza
La fiscalía solicita penas de entre siete y diez años de prisión para los ocho encausados en la pieza principal del caso Innova, en qué se investiga el pago de facturas por valor de más de 1 MEUR al arquitecto Jorge Batesteza y al exdirector del CatSalut, Carles Manté, por tareas de asesoramiento en la construcción del nuevo Hospital Sant Joan de Reus. Además de Manté y Batesteza, entre los implicados está el exdirector general de Innova, Josep Prat, y el exalcalde de Reus, Lluís Miquel Pérez, los cuales serán juzgados en la Audiencia de Tarragona. Según el escrito de acusación en que ha tenido acceso ACN, los contratos no siguieron la normativa de contratación pública y no se justificaron los trabajos realizados. Por otra parte, la fiscalía solicita el sobreseimiento sobre Sílvia Barberà, la pareja de Batesteza.
Según la fiscal, cuando Carles Manté y Jorge Batesteza cesaron de sus respectivos cargos en el CatSalut, los dos, junto con lo entonces alcalde de Reus, Lluís Miquel Pérez, y «una persona no determinada de la consejería de Salud», acordaron que Innova los contrataría en concepto de asesores en el planteamiento y construcción del hospital. El objetivo era «mantenerlos en el mismo nivel de ingresos que tenían en sus cargos anteriores».
Así, el alcalde Pérez se va concertado con la secretaria de Innova, Natàlia Torrell; la directora financiera del holding, Ester Ventura, y su director general, Josep Prat. Según la fiscal, querían «omitir totalmente cualquier tipo de procedimiento administrativo de contratación, así como producir un menoscabo efectivo del erario público, utilizando facturas simuladas o siendo conscientes de que su conducta obviaba las normas administrativas de contratación».
Carles Manté facturó más de 720.000 euros sin justificar ninguno de los trabajos encomendados
Después de cesar el 27 de diciembre del 2006 como director del CatSalut, Carles Manté constituyó la mercantil CCM Estrategias y Salud, SL, con sede en Mataró, el 7 de marzo del 2007. Sólo diez días después, Innova lo contrató hasta finales de año por un importe de 160.000 euros más IVA y con la posibilidad de encargos adicionales durante el 2008 de un máximo de 1.000 horas a razón de 160 euros la hora.
A partir del 1 de enero del 2009 y hasta junio del 2011, Manté presentó facturas mensuales de 16.000 euros más IVA, que Innova siguió pagando aunque ya no mantenía ninguna relación contractual. Según la fiscalía, el contrato entre la empresa de Manté e Innova fue adjudicado «con una omisión total y absoluta del procedimiento legal establecido», ya que no se adaptó a las normas de contratación pública.
En febrero del 2008, Mantiene remitió a Innova un documento de tan sólo dos folios con la «relación de trabajos realizados» para «intentar aparentar la realidad de los trabajos contratados». En total, cobró a Innova 720.120,82 euros más IVA y, en ninguna de las 32 facturas mensuales giradas a Innova, no presentó ni un solo informe justificante los trabajos.
Jorge Batesteza cobraba de dos partes para hacer el mismo trabajo
En el caso del arquitecto Jorge Batesteza, su primer contrato con Innova se firmó el 4 de junio del 2007, tan sólo cuatro días después de cesar como gerente de Infraestructuras del CatSalut, por tareas de asesoramiento técnico en la construcción del hospital. Posteriormente, se firmaron dos más, ascendiendo el importe total a 387.000 euros más IVA.
«Todos los acusados eran conscientes de que los contratos entre Jorge Batesteza e Innova fueron adjudicados con una omisión total y absoluta del procedimiento legal establecido, ya que no se acogió a las normas de contratación pública», recoge el escrito. En total, Batesteza sólo presentó cuatro informes sobre la evolución de los trabajos encargados, de los 43 que habría tenido que entregar. También giró más de 8.900 euros en concepto de desplazamientos.
Según la fiscal, Batesteza no desarrolló ningún trabajo concreto que justificara su contratación, sobre todo cuando su finalidad era «la misma que se adjudicó en la segunda de las mesas de contratación -en noviembre del 2006- donde intervino como gerente de Infraestructuras del CatSalut y que fue para la adjudicación del contrato de ‘project manager’». Este contrato se adjudicó a la UTE Euroconsult, liderada por el encausado Sergi Luqui.
El año 2008, Batesteza creó la mercantil BBATS Consulting Projects y «presionó» para que Euroconsult lo contratara como arquitecto para la obra del hospital. Eso posibilitó que Batesteza prestara, simultáneamente, servicios de asesoría técnica en el seguimiento y control de las obras a Innova y a la contratista Euroconsult. El arquitecto cobró por este segundo trabajo 186.400 euros.
Penas de hasta 10 años de prisión
La fiscal atribuye al exdirector general de Innova, Josep Prat; al arquitecto Jorge Batesteza, y al excalcalde de Reus, Lluís Miquel Perez, los delitos de prevaricación, malversación de caudales públicos, falsedad documental y tráfico de influencias. En el escrito solicita 10 años de prisión para cada uno de ellos, además de la inhabilitación para ejercer cargo público durante 20 años y una multa de 200.000 euros.
Para los otros cinco encausados, las penas pedidas por la fiscalía son inferiores a los 10 años de prisión. Así, para la exsecretaria de Innova, Natàlia Torrell, y la exdirectora financiera de Innova, Ester Ventura, la pena es de 7 años de prisión y un total de 15 años de inhabilitación para cargo público por los delitos de prevaricación, malversación de caudales|dinero públicos y falsedad documental.
En el caso del exdirector del CatSalut y responsable de la mercantil CCM Estrategias y Salud, Carles Manté, la fiscalía le atribuye los mismos tres delitos, pero eleva la pena a 8 años de prisión y 20 de inhabilitación.
Al exdirector de obras y proyectos de Innova, José Vicente Gómez, y al responsable de la UTE Euroconsult, Sergi Luqui, los acusa de prevaricación, malversación de caudales públicos y tráfico de influencias, con una pena de prisión de 9 años y también una multa de 200.000 euros a cada uno.
Por otra parte, la fiscal exculpa de cualquier responsabilidad y pide el sobreseimiento para la pareja de Batesteza, Sílvia Barberà, que figuraba como administradora de BBATS junto con su marido.
En concepto de responsabilidad civil, la fiscalía pide que los encausados indemnicen Innova con los 720.000 euros más IVA pagados a Carles Manté y los 186.400 pagados a Batesteza a través de la empresa BBATS. Además, solicita que devuelvan las retribuciones y gastos de desplazamiento que no se correspondan con trabajos realizados.
Dos piezas unidas en una sola causa
En diciembre del año pasado, el titular del Juzgado de instrucción número 3 de Reus cerró la instrucción de la pieza principal del caso Innova e incorporó la pieza separada número 2, correspondiente a la contratación de Batesteza. Entonces, Diego Álvarez de Juan esgrimió las dos piezas eran muy parecidos, «para no decir idénticas, en cuanto al modus operandi».