Las alegaciones trasladan a un pleno extraordinario la aprobación del presupuesto de Reus
La sugerencia formal de DenouReus para que la ciudadanía decida sobre 750.000 euros es de momento lo único y es suficiente para forzar el trámite
La aprobación definitiva del presupuesto municipal 2017, el paso previo a su aplicación, tendrá que producirse en un pleno extraordinario que se convoque a partir del próximo día 8. Es este jueves, fecha que coincide con la celebración del pleno ordinario del mes de junio, cuando expirará el plazo para la presentación de alegaciones en el expediente de presupuestos, que ya pasó el filtro de la aprobación inicial el 12 de mayo. Hasta el jueves al mediodía, una única entidad había registrado «sugerencias formales» a los presupuestos.
Se trata de la plataforma cívica DenouReus, que ha hecho el movimiento bajo la voluntad que en las cuentas municipales se incluya «una partida que permita la participación de la gente». Es decir, que se destine a presupuestos participativos los 750.000 euros que el PDeCAT anunció como parte del acuerdo para conseguir el «sí» de la CUP al presupuesto del 2016. Esta única alegación en el documento activa ya, por ella misma y sin necesidad de que se presenten más, el mecanismo de convocatoria de lleno extraordinario que sustituye lo que habría sido una aprobación automática si hasta el 8 de junio nadie se hubiera pronunciado formalmente en contra de ninguna de las partidas que aglutina el expediente.
Será en el transcurso del pleno extraordinario donde se lleve a cabo la aprobación o la desestimación de las alegaciones que se hayan presentado al cierre del plazo para hacerlo y, una vez resuelto este punto, se apruebe definitivamente el presupuesto municipal. La previsión es que todos los trámites puedan quedar completados este junio y fuentes municipales apuntaban el jueves que la intención es propiciar la aprobación «lo más bien posible». Y es que cuando entre en vigor la nueva previsión de cuentas, ya se habrán consumido seis meses del 2017 en que esta queda sujeta.
En relación a las alegaciones presentadas, DenouReus valora que el presupuesto municipal «estructuralmente, sigue consolidando las malas prácticas del pasado» y que «no representa ninguna evolución ni define ningún proyecto de ciudad más allá de atender el día a día de la gestión.
Un paso que se alarga dos meses
El primer expediente lo llevó el gobierno, sin éxito, en el pleno del 7 de abril. El «no» de la oposición desembocó en una cuestión de confianza vinculada a los presupuestos en que el alcalde tampoco recibió el apoyo mayoritario ni hubo ningún candidato que alcanzara el soporte necesario para plantear alternativa y encabezar una moción de censura en el primer plazo previsto. La oposición trabaja, tal como han anunciado los diferentes grupos municipales en las últimas semanas, en una opción sólida a seis meses vista, cuando ERC y Ara Reus sean legalmente hábiles por, si lo quisieran, integrarse en un acuerdo que hiciera caer Pellicer del cargo que actualmente ocupa.