El CMQ entiende que el alquiler es vigente y seguirá pagando la cuota a la Fàbregas
Hoy, 13 de junio, vence el acuerdo para ocupar el edificio y la propiedad presentará mañana una demanda de desahucio contra el centro
El plazo que fijó la propiedad de la antigua Clínica Fàbregas, al anunciar la ruptura del acuerdo de alquiler, a fin de que el Centre Médic Quirúrgic (CMQ) abandonara el edificio de la calle Gaudí expirará hoy sin que el centro se haya movido a otra ubicación. La familia Fàbregas presentará mañana al decanato, tal como asegura su abogada, a Gisela Trillas, una demanda de desahucio con el objetivo de recuperar las instalaciones.
La propiedad sostiene que el contrato de alquiler que permitía el CMQ desarrollar actividad en el inmueble «finaliza el día 13 de junio» y recuerda que en el edificio «están interesados dos operadores con que estamos negociando para continuar con la línea sanitaria, y que se podrían echar atrás seis al fin y al cabo continúa». Y entiende que la situación, «que puede alargarse en el tiempo», «nos perjudica gravemente porque no nos permite ofrecer el edificio en estos operadores» y «ni siquiera podemos acceder para revisar la situación precaria en qué seguramente se encuentra». Fuentes del CMQ detallaban ayer que el centro «seguirá abonando las cuotas del alquiler como lo ha hecho hasta ahora» porque «para nosotros, el contrato sigue siendo vigente, no ha «finalizado». Desde el centro subrayan que «la actividad continuará con normalidad».
El Ayuntamiento ya anunció, en enero, el traslado del CMQ al antiguo hospital así como «la continuidad del conjunto de los trabajadores» que forman parte. Y hace pocas semanas abría el proceso de licitación para encargar la redacción del proyecto de rehabilitación de las estancias que acogerán el CMQ en la calle Sant Joan. La decisión, tomada por el consejo de administración del propio centro, la justificaban Llauradó y el alcalde Carles Pellicer con seis puntos, entre los cuales detallaban la finalización del contrato de alquiler con los propietarios de la antigua Clínica Fàbregas y «una propuesta de renovación con unas condiciones económicas inasumibles para el Ayuntamiento». La fecha límite para la estancia en el edificio, que la propiedad –que alude a «la dejadez y el enfoque del CMQ», y «no a una cuestión económica» en la intención de romper el contrato– advirtió hace un año, es este 13 de junio.
A la plaza del Gegant Indi
La previsión es que el grueso de lo que ahora se hace a la Fàbregas pase a ofrecerse en las dependencias del entorno de la plaza del Gegant Indi, donde se ocupará lo que fue el edificio de consultas externas más una parte del edificio anexo. Se colocará la actividad ambulatoria, que incluye cirugía mayor ambulatoria, cirugía menor ambulatoria, urgencias, consultas externas y exploraciones complementarias. Consultas externas, la planta de hospitalización y todas las intervenciones de mutuas y privados que requieran de ingreso seguirán localizadas en el Hospital Sant Joan de Reus. El coste global del traslado asciende a tres millones de euros.
Diferencias de calendario
El punto de conflicto ahora es que el calendario con que trabaja el Ayuntamiento y la voluntad de la propiedad de la antigua Clínica Fàbregas no coinciden. Y de aquí el anuncio de la familia de resolver la situación con una demanda de desahucio. En el CMQ interpretan, con todo, como unilateral la decisión de poner fin al contrato, y es por eso que el centro seguirá pagando las mensualidades del alquiler donde actualmente opera y donde lo hará todavía durante algunos meses más, mientras no culmina el proyecto de reforma de las dependencias en la calle de Sant Joan y se materializa el traslado de maquinaria, personal y servicios a la nueva ubicación.