El Carme, repugnado por la visión de una trampa donde las palomas mueren de hambre
Denuncian una mala gestión de la jaula, situada en un bloque abandonado del Incasòl que el barrio hace tiempo que quiere perder de vista
La Asociación de Vecinos l’Harmoniadel Carme ha denunciado al Ayuntamiento la gestión de una trampa de palomas porque que en reiteradas ocasiones los residentes de los bloques próximos han tenido que convivir durante días con la imagen de diversas de estas aves muertas por inanición. La estructura está instalada en el terrado de un edificio abandonado que es propiedad del Incasòl y que los vecinos esperan perder de vista pronto, aunque todavía no hay una fecha concreta de derribo. El bloque se sitúa entre las calles Sant Benet, Sant Francesc i Closa de Freixa.
«Un vecino que tiene el balcón a cuatro metros de la trampa se quejó de que la imagen era tan desagradable que no dejaba salir a su criatura al balcón. Incluso salían ratas a comerse las palomas», explica Pere Corrales, presidente de la entidad vecinal. Las muertes de palomas por inanición en esta jaula son recurrentes, pero el peor episodio se vivió a principios del mes pasado. La trampa estuvo sin mantenimiento durante semanas, y en el suelo se acumularon durante días una veintena de cadáveres de aves.
Esperando el derribo
En declaraciones en este diario el concejal de Urbanismo, Marc Arza, ha manifestado que esperan cerrar en el plazo de unos meses un acuerdo con la Generalitat para que se haga cargo del derribo del edificio que aloja la jaula y de lo que hay al lado. Los vecinos del barrio hace años que esperan esta actuación. Años de abandono de este dos bloques han hecho que se hayan convertido en una zona de atracción de palomas. El derribo, además, permitiría unir en una gran plaza dos espacios abiertos ahora ocupados por dos zonas azules: la de Sant Francesc, conectada con el arrabal Martí Folguera por el Portal del Carme, y la que hay entre la calle Sant Benet y el Closa de Freixa. Aunque no está concretado, los vecinos esperan que los terrenos se conviertan en un espacio urbanizado con árboles.
12 jaulas en la ciudad
La de este bloque es una de las 12 jaulas de captura que la concejalía de Medio Ambiente tiene distribuidas en los puntos donde se detecta una mayor presencia de palomas. Esta consiste en una puerta sólo de entrada que atrapa las palomas que acceden atraídas por el pienso que colocan en el interior. La trampa necesita el mantenimiento continuo de un operario que retira los ejemplares capturados y deposita la comida para volver a atraer nuevos. Según el Ayuntamiento, esta red de jaulas ha permitido la captura de 2.000 ejemplares en los primeros cinco meses del año. Aparte de estas jaulas, el consistorio utiliza también otros métodos de control como halcones o sistemas sonoros antiestorninos, y desde enero está haciendo una prueba piloto con pienso anticonceptivo.