Una avería en uno quiere Reus-Manchester provoca 14 horas de espera en el Aeropuerto
Thomson desvió cerca de la medianoche un Boeing 767 desde Málaga para recoger pasajeros que tenían billete a las nueve de la mañana
Una incidencia técnica en un avión de la ruta Reus-Manchester que opera a Thomson Airways obligó ayer los pasajeros a desembarcar y asumir una espera de prácticamente catorce horas antes de tener la certeza de que podrían volver a casa, el mismo día, en un vuelo alternativo. La aeronave afectada, un Boeing 737-800, tiene capacidad para cerca de 190 viajeros. La incidencia se detectó poco antes del despegue, programado desde la capital del Baix Camp a tres cuartos de diez de la mañana y que se aplazó y se canceló antes de acabar teniendo lugar, finalmente, ya pasadas las once de la noche. Desde de Aena confirmaban ayer, sin profundizar en detalles, la avería. Fuentes próximas al funcionamiento del Aeropuerto de Reus precisaban que una de las escaleras utilizadas habitualmente para facilitar el acceso del pasaje al interior del avión habría impactado contra un winglet, el tramo final en el extremo del ala. La vez recibida a la pista, y ya con los pasajeros a bordo, habría inhabilitado el avión para completar la conexión con todas las garantías.
Thomson Airways comunicó primero un retraso en la salida del vuelo, que va reporgramar-se a las tres y cuarto de la tarde. El margen tenía que permitir la llegada de otro avión que o bien trasladara a los viajeros a Manchester o bien desplazara a Reus las piezas necesarias para resolver la incidencia del primero, en la cual mecánicos habían estado trabajando con la máxima celeridad desde la mañana. Hacia las tres, con todo, las pantallas de la terminal anunciaban la cancelación del vuelo. en Medio de la incertidumbre, y bien entrada la tarde, la conexión con Manchester volvía a iluminarse: Thomson Airways habría aprovechado una de sus rutas desde el Aeropuerto de Màlaga-Costa del Sol para trasladar el avión –de mayores dimensiones y con más asientos, un Boeing 767-300– que la recorría en Reus y recoger pasajeros hacia Manchester.
La tripulación, pendiente
Durante el impàs comprendido entre la avería en el ala y la primera cancelación, la tripulación del avión permaneció en el mismo Aeropuerto de Reus con «la previsión» que la ruta se pudiera reanudar a la hora indicada en los paneles. Informaban los viajeros sobre el retraso en la salida, junto con el personal del suelo de Thomson y en contacto con el de handling, y los invitaban a mantenerse atentos «por si hubiera cualquier cambio». Los mostradors para el check-in y la facturación se habían cerrado con el primer embarque. La cifra de pasajeros afectados por el baile de demoras y cancelaciones, que se resolvió a las once y cuarto de la noche, no ha trascendido. Sin embargo, en plena temporada turística, hay que esperar que la aeronave habría rozado el pleno de camino en la ciudad inglesa.
La compañía Thomson Airways ofrece, cada semana durante los meses de verano, un total de cuatro enlaces con Manchester desde el Aeropuerto de Reus: martes, viernes, sábado y domingo. Los procedimientos más habituales ante una situación como la que se dio ayer pasan para reubicar a los pasajeros en vuelos posteriores –una cuestión que habría resultado más o menos complicada por las fechas en que tiene que arreglarse la aerolínea– o bien la programación de uno nuevo quiere a lo largo de las siguientes horas. Esta fue la apuesta de la aerolínea.
Domingo con 48 movimientos
La del vuelo Reus-Manchester ha sido la única incidencia en que se ha registrado en el Aeropuerto de Reus este domingo 30 de julio, según concretan fuentes de Aena, en uno de los fines de semana intensos dentro de la temporada turística. En total, el equipamiento de la capital del Baix Camp ha acogido hasta 48 movimientos en las últimas 24 horas. Por término medio, cada fin de semana, entre el viernes y lunes, las instalaciones de Reus gestionan cerca de 150 movimientos. A diferencia de otros aeropuertos de más amplias dimensiones como el de El Prat, el Aeropuerto de Reus no contempla una operación salida como tal, pero sí que recoge datos optimistas estos meses.
Desde de Aena insistían ayer que «el Aeropuerto está teniendo un funcionamiento normal» a pesar de la avería en el avión de Thomson Airways» y recordaban que tampoco por esta circunstancia «ha sido necesario activar ningún plan ni ningún tipo de alerta». También que la incidencia tuvo lugar «antes de que el avión despegara, cuando todavía estaba en el suelo, a las diez menos cuarto de la mañana» y que «ninguna persona ha resultado herida» por el episodio en la pista. El Aeropuerto de Reus está dejando cifras muy positivas en este verano en que el equipamiento avanza con el reto de cerrar en el 2017 con un millón de pasajeros. Tiene programados, en principio, 1.078.282 por este periodo de más calor.