Firma un alquiler de «cero euros» con el banco al que no puede pagar la hipoteca
La PAH negocia para que una vecina de Reus pendiente de un subsidio mantenga su casa hasta que cobre
Una vecina de Reus que, ante una «complicada situación personal», se vio forzada el año 2014 a dejar de pagar la hipoteca de su casa podrá seguir viviendo en ella. Lo hará a través de un contrato de alquiler social establecido con la misma entidad bancaria con la que había firmado la hipoteca y que contempla una importante particular: los primeros meses de la estancia ya regulada estarán «a cero euros». Justo el «margen necesario», en concreto, hasta que la mujer empiece a percibir unos ingresos de los cuales ahora no dispone.
El nuevo acuerdo con el banco, que permitirá que la vecina no se tenga que marchar de su piso –donde se había mantenido instalada también durante estos últimos tres años–, ha resultado posible «a través de las negociaciones que ha llevado a cabo la PAH desde el diciembre pasado, donde hemos rechazado varios contratos que incluían nueve cláusulas abusivas,» explica Sandra Casanova, miembro de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH) en Reus. Casanova asegura que con este caso se ha conseguido un acuerdo que es «único» y «la primera de sus características en la ciudad», ya que «la entidad se ha hecho cargo que esta persona necesitaba un cierto tiempo donde no podría pagar, que hacía falta una solución, y ha sido flexible».
El activista de la PAH relata que «las primeras propuestas de acuerdo que el banco puso encima de la mesa, después de que empezáramos a dialogar sobre un alquiler, eran totalmente abusivas teniendo en cuenta las circunstancias de ella». Se da la circunstancia que a la mujer, de 39 años, le ha estado recientemente reconocida una discapacidad del 65% que compromete su capacidad para trabajar y por la cual tiene derecho a percibir una ayuda. Será cuando lo haga –hasta ahora había estado saliendo adelante con la ayuda económica de familia y amigos– que estará en disposición de afrontar el pago de las cuotas. El alquiler social acordado con el banco establece mensualidades de 34,08 euros.
«Hemos creado un precedente»
Desde la PAH recuerdan que «al llegar a nuestra asamblea» la mujer se encontraba «muy desesperanzada» y celebran que «la cifra de los cero euros se respete hasta que ella pueda pagar, porque ahora mismo no dispone de ingresos.» En el momento de cerrar este nuevo contrato que ahora rige la estancia en el piso, la entidad bancaria condonó a la vecina los 84.000 euros que todavía tenía pendiente pagar de la hipoteca suscrita al momento de comprar su casa, ya que «no tenía sentido mantenerla porque seguramente ella tampoco habría tenido la posibilidad de pagar la cantidad entera». Problemas de salud y la pérdida del trabajo provocaron que se viera forzada a dejar de responder a la hipoteca ahora hace tres años.
Con esta innovadora entendida, «estamos creando un precedente ya que nunca se había conseguido un alquiler que fuera tan bajo», añade la miembro de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca, que avisa que «desde la PAH seguiremos luchando y trabajando a fin de que se respeten los derechos fundamentales de todos y no nos detendremos hasta que bancos y políticos apliquen las leyes que nos protegen».