El Hospital limita su capital social y esquivará la causa de disolución

El Hospital Sant Joan de Reus ha llevado a cabo una reducción de capital social de 3.516.021,40 euros que fija ahora la cifra global para la sociedad en su límite legal, 60.101,20. La operación, anunciada al Boletín Oficial del Registro Mercantil (BORME) con fecha del 14 de agosto, da cumplimiento a los acuerdos alcanzados en el pleno de mayo –con los votos a favor de PDeCAT, ERC y Ara Reus, el voto en contra de la CUP y las abstenciones de Cs y PP- y tiene que servir para remover la causa de disolución en que había incurrido la empresa municipal a raíz del desequilibrio económico detectado al cierre del ejercicio 2016, producido el 27 de marzo.

El desequilibrio enfilaba, en detalle, hasta los 8.423.4480 euros, cerca de 4 millones de los cuales son consecuencia del desvío de fondo de Gecohsa que se materializó en julio del 2016 para «garantizar la viabilidad de la entidad» en una situación similar a la actual, el ejercicio 2015.

Fuentes municipales han confirmado que el anuncio legal en el BORME significa el paso final en la materialización de la reducción de capital social, que se realiza, tal como se comunicó tres meses atrás, «contra pérdidas de ejercicios anteriores, sin modificar el valor nominal de las acciones fijado en 6.010,12 euros y amortizando las acciones numeradas del 11 al 596 correspondientes al socio único Ayuntamiento de Reus». La eliminación de la causa de disolución se hará efectiva «en un plazo máximo de tres meses a contar desde la publicación en el BORME».

Y es que ante el desequilibrio de 8,4 millones, el Ayuntamiento tuvo que aplicar diferentes artículos de la Ley de Sociedades de Capital. Entre ellos el 365 que, a partir del mismo 27 de marzo, contemplaba que «los administradores tendrán que convocar a la junta general en el plazo de dos meses a fin de que adopte el acuerdo de disolución o, si la sociedad fuera insolvente, inste el concurso. Cualquier socio podrá solicitar la convocatoria» y que «la junta general podrá adoptar el acuerdo de disolución o, si constara al orden del día, aquellos que fueran necesarios para remover la causa».

La aportación de bienes inmuebles

En este último sentido, el de la remoción de la causa de disolución, el pleno aprobó la reducción de capital social pero también «efectuar una aportación no dineraria, de acuerdo con el previsto a la normativa contable, para compensar pérdidas acumuladas de la sociedad, mediante la aportación de bienes inmuebles, con un valor tasado por un perito independiente sea igual o superior a 1.285.711,74 euros». Con estas dos intervenciones, tal como explicaba la concejala de Salud y presidenta del Grup Salut, Noemí Llauradó, al pleno de mayo, «el capital social sería igual al patrimonio neto de la sociedad» y no inferior, hecho que suprimiría la causa de disolución del Hospital Sant Joan.

Estos dos movimientos prosperaron acompañados de uno de tercero que «autoriza a la alcaldía, una vez determinados los inmuebles susceptibles de ser aportados a la sociedad, para la adopción de todos aquellos acuerdos necesarios para su ejecución.» Antes no empezaran a impulsarse, el desequilibrio del Sant Joan había hecho saltar todas las alarmas en el Hospital Comarcal de Móra d'Ebre, desde donde promovieron diferentes denuncias públicas por pedir que el importe necesario para resolver la situación en Reus no volviera a salir de Gecohsa. En Móra ponían de manifiesto los perjuicios que el desvío de los 4 millones de euros para compensar los resultados del ejercicio 2015 había generado en el centro hospitalario ebrense.

Un «preacuerdo» con la plantilla

El mismo escenario comportó también movilizaciones entre los trabajadores del Hospital Sant Joan de Reus, que se encontraban en aquellos momentos negociando el nuevo convenio laboral y reclamaban el pago de las Direcciones por Objetivos (DPO) pendientes a la plantilla. Empresa y profesionales llegaron a un preacuerdo sobre el nuevo convenio 2017-2019 a mediados de julio. Este, sin embargo, tendrá que ver redactada su versión definitiva y quedar rubricado antes de octubre.

Gestión Generalitat-Ajuntament

Al fin y al cabo coincidió, también, con el anuncio por parte del Departamento de Sanidad de la creación de un consorcio Generalitat-Ayuntamiento que tomara el control del Hospital Sant Joan de Reus. En este ámbito, el CatSalut inició en mayo el proceso por|para la implantación del nuevo modelo, que no entrará en vigor hasta el 1 de enero del 2018, y solicitó al consistorio información vinculada en las instalaciones de que dispone el centro, la maquinaria que el equipamiento acoge, una relación de los puestos de trabajo y resultados económicos de los últimos ejercicios.