Se marchan todos los agentes de la Policía Nacional alojados en el hotel Gaudí de Reus

Todos los agentes de la Policía Nacional que estaban alojados en el hotel Gaudí de Reus se han marchado este jueves. La salida ha sido gradual, ya que algunos ya dejaron el hotel el miércoles y otros lo han ido haciendo durante esta mañana del jueves. Ante el establecimiento, situado en el Arrabal de Robuster, se han concentrado una treintena de personas que han ido a mostrar el apoyo|soporte a los agentes, con alguna bandera española y gritos de 'No estáis solos' cuando han salido los agentes, cargados con maletas y mochilas. También ha habido que se ha acercado para mostrar su rechazo a la actuación policial por parte de este cuerpo. Por la marcha de los agentes, se ha habilitado todo un dispositivo en que se ha cortado el tráfico en la calle, regulada por la Guardia Urbana, y se han puesto unas vallas para evitar el paso hacia el hotel, que han controlado los Mossos D'Esquadra. Por ahora, se desconoce la destinación de los agentes.

La retirada de los agentes viene después de una fuerte presión ciudadana, que se ha concentrado delante de las puertas del hotel en varias ocasiones, y el manifiesto del alcalde, que ha recibido el apoyo de cuatro grupos municipales. Se estima que en este establecimiento han hecho estancia entre sesenta y ochenta agentes desde poco después de la festividad del 11 de septiembre.Además de los agentes que hacían noche en Reus, habría otros alojados en un hotel de Salou.

A primera hora de la mañana se ha marchado una primera furgoneta con varios agentes. La segunda retirada se ha producido pasadas las 12 del mediodía, cuando dos vehículos de la Policía se han detenido a un lado del hotel y una decena de agentes ha salido por una puerta lateral del establecimiento, entre los aplausos de los concentrados en la acera de delante. Pasados unos minutos se han marchado el resto de policías en una decimoquinta de furgonetas que se han detenido en la calle principal mientras los agentes salían arrastrando maletas y cargando los cascos y escudos.

Entre los concentrados había, generalmente, ciudadanos que han agradecido la tarea de los agentes y los han animado a ir «con la cabeza alta» y les han recordado que «no están solos». Detrás de la misma valla había también vecinos contrarios a la presencia del cuerpo en Cataluña, con esteladas, que han compartido los momentos de espera conversando e incluso riendo con el resto de los presentes.