La CUP no prevé ir al juzgado en la segunda citación por el manifiesto del 3-O

Los concejales de la CUP citados a declarar en el juzgado de instrucción número 2 de Reus por un supuesto delito de odio a raíz de la firma, el pasado 3 de octubre, del manifiesto que pedía la salida de la Policía Nacional del Hotel Gaudí, prevén no comparecer. La del martes a las ocho y media es la segunda citación que Marta Llorens, Mariona Quadrada y Oriol Ciurana reciben por parte de la jueza, después de que la semana pasada decidieran no acceder al edificio de los juzgados, tal como explicaron, porque «obedecemos la legalidad catalana, la república salida de los resultados del referéndum del 1 de octubre y no podemos declarar ante un juzgado que no nos representa». En el caso de Quadrada, y tal como precisaron fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC), la declaración quedó suspendida «porque su abogada tenía otro señalamiento» en que coincidía. Fuentes de la CUP consultadas por el Diari Més confirman que los concejales no comparecerán y esperarán a ser detenidos. Este paso, sin embargo, no tiene por qué darse mañana: la jueza, que podría haber ordenado la detención de los que no respondieron a la primera citación «si es que no se aportó ninguna justificación», podría optar por proceder a una tercera citación o bien solicitar una reunión para pedir la detención de los concejales. En caso de tener lugar, sería una «detención instrumental», con el fin de llevar a los concejales al juzgado.

La retirada de pancartas

En otro orden de cosas, la Junta Electoral de Reus ha aceptado la petición formulada por el PP y ha ordenado a la Guardia Urbana de Reus y a la de Cambrils que retire las pancartas por|para la liberación de los Jordis de los Ayuntamientos. La reusense Tona Duch pedía a Pellicer que «no gereni más tensión». Ciutadans había pedido también la retirada de pancartas.