Sale a subasta un dragón esculpido por Gaudí y valorado en 100.000 euros

La casa de subastas online Setdart ofrece desde principios de mes un dragón de hierro trabajado en forja, obra del arquitecto Antoni Gaudí. La pieza, que lleva el nombre de Drac, tiene unas dimensiones de 109x48x44 centímetros y cuenta con el certificado de autenticidad expedido por el director del Espacio Gaudí de La Pedrera, se encuentra valorada en entre 100.000 y 120.000 euros, tal como figura en la ficha de la misma obra. La subasta, que concluye el próximo 20 de diciembre, ha recibido, desde que se pusiera en marcha, un total de tres propuestas: la primera, el 6 de diciembre, ponía encima de la media 32.000 euros; la segunda, el día 11, puso hasta 34.000 y la detrás de las propuestas, que tiene fecha del martes pasado, día 12 de diciembre, ofrecía un total de 38.000.

Drac, tal como queda reflejado en la descripción de la propia casa de subastas, se encuentra enmarcado «en la estética del modernismo catalán, esencialmente en el estilo y la producción artística de Gaudí.» Como ejemplo de todo, «la similitud con otras piezas hechas por el artista, como el dragón del estuco heráldico del Palau Güell, en la valla de la entrada en la finca Güell, el picaporte de la puerta de entrada en la casa Calvet o el pavimento hidráulico de la casa Batlló».

La escultura, tal como la describen a Setdart «muestra un gran detallismo al rostro, las llamas, las escamas de la cola y las grifas del animal», de manera que «Disfrutó consigue crear una obrade grande carga expresiva» en una imagen que «estuvo costando en el modernismo catalán». Como el de Gaudí, en diferentes ubicaciones y surgidos de manos de diferentes artistas, «Barcelona cuenta con cerca de 400 dragones que, vinculados a la imagen de Sant Jordi o bien sin estarlo, cogieron|tomaron presencia en los edificios más significativos de la época».

Una acuarela de Fortuny

No es la primera vez que piezas vinculadas con Reus y con sus artistas salen a subasta a esta casa. A finales del 2016 y a petición de la Dirección General de Archivos, Bibliotecas, Museos y Patrimonio, el Departamento de Cultura de la Generalitat se hizo con la acuarela sobre papel Papa Innocenci X, obra firmada por Marià Fortuny Marsal que reproduce una de las más emblemáticas de pintadas por Velázquez.

La pieza, hasta entonces en manos privadas, pasó a ser propiedad de Cultura al haber ejercido el Departamento el llamado derecho de tanteo sobre la pintura. Es decir, adquirir la pieza al precio de salida después de que esta se publicara como aparte de un lote en una casa de subastas que lo habría dirigido a un coleccionista privado. La compra, en su caso, quedó sellada por un importe de 10.000 euros impuestos no incluidos.