Infraestructuras
Aena prohíbe alimentar los animales que ronden por los recintos de aeropuertos
La nueva medida de seguridad se extiende a toda la red y también a Reus, donde los trabajadores apuntan que ante cualquier irrupción se avisa Control de Fauna
Este pasado martes entró en vigor, en todos los aeropuertos de la red, la nueva medida de Aena incluida dentro de la Normativa de Seguretat en Plataforma y que prohíbe a sus empleados, bajo amenaza de expediente, alimentó los animales que ronden por los recintos aeroportuarios. La regulación, tal como confirman fuentes de Aena, implica también el Aeropuerto de Reus y quiere evitar riesgos que la presencia de fauna en la zona puede representar para el tráfico de aeronaves.
En otros aeropuertos de mayores dimensiones, como es el caso de Madrid-Barajas, su implantación ha sido acompañada de polémica después de que la Central Sindical Independent i de Funcionaris (CSIF) hiciera público un comunicado donde tildaba la prohibición de «maltrato animal» y pedía Aena que resolviera de otra manera el problema que supone, en este escenario concreto, una colonia de cerca de 400 animales abandonados.
En el Aeropuerto de Reus, trabajadores apuntan la presencia frecuente de conejos dentro de los terrenos que forman parte del recinto aeroportuario y la irrupción, todo y que no frecuente, de algunos gatos y perros. También, en alguna situación más aislada, de jabalíes. Explican, con todo, que en el equipamiento de la capital del Baix Camp se sigue de manera estricta el protocolo que hay que aplicar cuando se detecta la presencia de un animal en la zona, y que pasa por dar la alerta al servicio de Control de Fauna. Este es el responsable de localizar, capturar y trasladar el animal en cuestión o bien hasta una localización segura o a manos de la entidad o institución que se tenga que hacer cargo.
«En ningún caso», concretan las mismas fuentes, «se alimenta aquí animales que puedan llegar» porque «es un aeropuerto relativamente pequeño donde todo está controlado y el personal estamos conscientes de que hacerlo podría atraer su presencia y generar peligro». Además, explican, el Servei de Control de Fauna, que ofrece servicio durante las horas de luz, «acostumbra a actuar muy rápidamente y con eficacia».
Dos perros en la pista, en junio
Justo hace seis meses, a finales de junio del 2017, la irrupción de dos perros en la pista del Aeropuerto de Reus obligó a intervenir agentes de la Guardia Civil, en un suceso que se dio a última hora de la noche y que coincidió con la franja prevista para el aterrizaje de dos vuelos procedentes de Dublín y de Cork. Personal del aeródromo los detectó, siguiendo los protocolos establecidos, hecho por el cual se activaron efectivos de la Guardia Civil que recogieron los perros. El episodio no tuvo afectación, tal como aseguraban entonces desde de Aena, en la operativa, y los pasajeros de las rutas con Dublín y Cork aterrizaron a la hora. Sí que hizo, anecdóticamente, que uno de los dos aviones tuviera que esperarse sólo unos instantes, sobrevolando el Aeropuerto, para derribar con la máxima seguridad.