El CUAP Sant Pere amplía observación, enfermería y boxes en 280 metros

La ampliación de la superficie destinada a urgencias al CAP Sant Pere, una de las dos fases del proyecto que el Instituto Català de la Salut (ICS) ejecuta en el equipamiento desde finales de en el 2017 y que supone una inversión de cerca de 300.000 euros, dotará esta zona de 279 nuevos metros –el doble de los actuales–, los cuales irán destinados a la creación de más boxes de críticos y al refuerzo del área de observación, del control de enfermería, de una sala de espera y de algunas de las consultas polivalentes. Una vez haya quedado completado este ámbito, se procederá a la redistribución de una serie de servicios incluidos dentro del mismo CAP en un paso que se corresponderá con la ejecución de la segunda fase. Fuentes del ICS han confirmado al Diari Més que los trabajos en este sentido se encuentran bastante adelantados y que la previsión es que todo quede terminado «en un par de meses».

La compatibilización de los trabajos con la actividad asistencial habitual del centro ha comportado la reubicación de diferentes unidades del CAP Sant Pere y es por eso que, tanto en el exterior como en el interior del equipamiento, el ICS ha instalado cartelería provisional para orientar y redirigir a los usuarios. Cuando quede consumada la segunda fase de la remodelación, «espacios como radiología o la atención al usuario» cambiarán definitivamente de lugar. En estos momentos, tal como detallan las mismas fuentes, la tercera planta del CAP se encuentra temporalmente cerrada con el fin de poder materializar esta redistribución de los servicios tal como estaba programada.

La mejora de la parte de CUAP, la de las urgencias del CAP Sant Pere, es importante de cara al futuro en un panorama en que tanto el Hospital Sant Joan de Reus como otros centros de la demarcación han dado muestras de saturación, este invierno, coincidiendo con la proliferación de virus y la afectación de la gripe. Las instalaciones del CUAP están preparadesper asumir visitas de menor afectación y descargar así el Sant Joan de pacientes la atención a los cuales no se corresponde emergencias, pero también para hacer frente a estos casos. Hace pocos días, el Hospital habilitaba seis camillas y seis butacas adicionales para asumir la elevada afluencia de pacientes y reducir el tiempo de espera de las ambulancias que descargan al centro. Con esta solución, la capacidad de las urgencias del Hospital Sant Joan ha llegado hasta los 70 pacientes.

Un servicio más resolutivo

La intervención en las urgencias del CAP Sant Pere, tal como adelantó este medio, tiene el objetivo de incrementar la resolución del servicio a través de la mejora de los flujos de movimientos y del aumento del espacio dónde se ofrece la asistencia Así, la reforma, especialmente la que tiene que ver con el CUAP, pretende aportar más coherencia en las instalaciones y optimizar con eso los tráficos que se dan. A los cambios que ya se han hecho en las urgencias –en una primera fase prácticamente finalizada, según apuntan desde el ICS– les está sucediendo la fase que mejorará la entrada del CAP Sant Pere y la atención al usuario –entre otros puntos–, que se corresponde con la segunda.

Todo se enmarca en el Plan Funcional del CAP Sant Pere que el Instituto Català de la Salut impulsa desde meses atrás y que ha empezado a dejar frutos. Sin ir más lejos, el verano del 2016, la mitad izquierda de la segunda planta del centro, correspondiendo en el Área Básica de Salud (ABS) Reus II, cerró y reubicó temporalmente el grueso|grosor de las consultas que se alojan –con la correspondiente señalización, tal como se ha hecho ahora– para sustituir parte del sistema de climatización. Una reforma, esta, en la que el ICS invirtió cerca de 75.000 euros y que se llevó a cabo igualmente en dos fases. El total del sistema de 'aire, colocado más de tres décadas atrás, se está reemplazando por tramos con la finalidad de renovarlo al conjunto del edificio. Este verano, sin embargo, no se actuó porque el esfuerzo se ha dedicado plenamente a las urgencias y la atención al usuario.

Reformulación de espacios

Esta redistribución de los espacios al CAP Sant Pere era una de las demandas de una parte del personal del mismo equipamiento, que apuntaba en su momento que, aunque los pacientes acudían al centro con una cita previa, en algunos de los puntos se generaban colas y la «falta de información» entorpecía el trabajo de algunos de los trabajadores, que tenían que responder consultas sobre la ubicación de los servicios mientras desarrollaban las tareas de que les eran propias. Las obras que ahora tocan a su fin salieron a licitación el pasado mes de agosto.