El sello de Sant Blai: o ahora, o nunca

Los blaiets, las galletas que se elaboran y se comen por Sant Blai en Reus, podrían exactamente disputar el título para encabezar la lista de tradiciones en la ciudad. Por la efeméride del santo, que ocurre el 3 de febrero, las pastelerías y colmados ofrecen esta galleta que, según la leyenda, tiene el poder curador del dolor de garganta si se lleva a bendecir –no en vano Sant Blai es el patrón de los otorrinolaringólogos.

Este dulce, elaborado con una pasta de harina, huevos y mantequilla, viene decorado con la imagen del santo, que se presenta con la mitra y el báculo. Esta ilustración se estampa sobre la pasta de galleta antes de cocerla al horno, y desde el año 1947, la Llauneria Mata de Reus despacha el sello necesario para dar este toque final al blaiet.

«En las pastelerías más antiguas tienen un molde de madera, pero la mayoría utilizan nuestro sello», explica Misericòrdia Mata, propietaria del negocio. Fue su padre, Jordi Mata, quien en 1947 pidió a un escultor que le esculpiera la imagen del santo para hacer un sello. Desde entonces, que en la tienda despachan sin cesar. «Es un trabajo de artesanía, intervienen dos o tres industriales, y está hecho de aluminio», apunta la Misericòrdia. En la misma tienda también se podía encontrar el corta pastas, un utensilio también singular, por la singularidad del blaiet: «los encargábamos en Italia, porque normalmente, los corta pastas ondulados tienen una onda grande, pero el blaiet tiene los bordes con una onda más pequeña, y de estos, con la medida de nuestra galleta, no se hacían. Así que cada dos años, más o menos, hacíamos pedido de unos doscientos talla pastas para blaiets», recuerda.

La venta de sellos de Sant Blai, sin embargo, se disparó el pasado mes de diciembre, cuando la centenaria tienda la Raval de Santa Anna anunció el cierre del negocio y la consiguiente liquidación. «La gente empezó a venir a buscar sellos de Sant Blai, y se acabaron. Hacemos unos treinta o cuarenta al año, porque se trata de una pieza muy artesanal, que además sólo se consume en la ciudad de Reus,» explica la Misericòrdia. Pero en la hojalatería se encontraron con que los clientes les seguían pidiendo. Así que, el 26 de enero, anunciaron vía Facebook que, «dado el alud de solicitudes del sello», abrían un periodo para hacer pedidos. La fecha límite para encargar la pieza es este 31 de enero, y el precio es lo mismo que tenía cuándo se venía a la tienda, 75 euros. Del corta pastas, por su parte, ya no servirán más. Los pedidos se tienen que hacer de manera presencial a la tienda, que permanecerá abierta hasta este mismo día, ya que está en liquidación por jubilación.

La Llauneria Mata es una tienda especializada en la venta de utensilios y productos para la elaboración y decoración de cocina y pastelería, que abrió puertas a Reus el año 1861. A dos días de cerrar definitivamente, la Misericòrdia asegura que, lejos de sentirse tristes, están «muy contentos por la perspectiva de la nueva vida que se presenta».