Política
Pellicer pierde la cuestión de confianza y los presupuestos quedarán aprobados en 30 días
A pesar de la falta de entendimiento con la oposición, el alcalde reusense insistió en la voluntad de extender la mano con el fin de llegar a acuerdos y seguir negociando
El Ayuntamiento de Reus tendrá que esperar treinta días con el fin de dar los presupuestos por aprobados. El alcalde, Carles Pellicer, ha perdido la cuestión de confianza vinculada a los presupuestos en qué sólo los 11 concejales de los tres partidos del gobierno municipal -PdeCAT, ERC y ARA Reus- han votado a favor, mientras que los 16 miembros de la oposición se han mostrado contrarios. La derrota era esperada después de la negativa en bloque de la oposición de aprobarlos en el pleno correspondiente. Pellicer inició una ronda de contactos insuficiente para la aprobación de las cuentas y recurrió, por segunda ocasión en su mandato, a una cuestión de confianza. A pesar de perderla, Pellicer sabe que las cuentas quedarán aprobadas en treinta días, el plazo que tiene la oposición para presentar una moción de censura y, por lo tanto, un gobierno alternativo. Esta, sin embargo, no llegará debido a la falta de entendimiento que también caracteriza la oposición reusense. Por eso, al acabar el pleno, ha asegurado que habían acudido a la cuestión «con la cabeza alta y con la conciencia tranquila».
Carles Pellicer ha iniciado el pleno defendiendo que la cuestión de confianza respondía a la necesidad de desbloquear la situación económica. «Bloqueo como hecho descriptivo, no como ataque a la oposición», ha matizado el alcalde. También ha hecho un balance de la ronda de contactos, de la cual quedó muy satisfecho, a pesar de reprochar que si en Reus se gobierna en minoría «todos tendríamos que hacer autocrítica por la capacidad que tenemos de diálogo y de llegar a acuerdos», acusando la oposición del «tacticismo con el que» han «actuado» a pesar de reafirmar la voluntad de mantener el diálogo. También la concejala Montserrat Vilella ha recordado a la oposición a que el equipo de gobierno «es responsable de buscar acuerdos, pero es responsabilidad de todos encontrarlos».
Precisamente, de la ronda de contactos, Pellicer también ha valorado la sensación «de incredulidad» ante la negativa de los presupuestos «después de haber oído comentarios que reconocían el esfuerzo» en la construcción de las cuentas municipales.
La oposición ve falta de diálogo
El alcalde reusense ha interpelado a la totalidad de los grupos municipales agradeciéndoles el tono cordial de todas las reuniones realizadas durante la ronda de contactos. Algunos miembros de la oposición, sin embargo, le han reprochado que encontrarse en una cuestión de confianza demuestra su poca capacidad de diálogo y de llegar a acuerdos. El portavoz Partit Popular en el consistorio, Sebastià Domènech, ha sido uno de los que se ha mostrado más crítico con Pellicer, defendiendo que «no ha habido diálogo hasta hace una semana, cuando no se aprobaron los presupuestos», y pidiéndole que «no traspase la falta de voluntad negociadora a los grupos de la oposición». Andreu Martín, portavoz del PSC, ha recordado que la ronda de contactos sólo ha servido para «volver a hablar de nuestras propuestas a los presupuestos». Ante la defensa que los grupos de gobierno han hecho de la gestión de la alcaldía reusense, Martín ha recordado que lo que trata el pleno de hoy es «mostrar la confianza hacia el alcalde y no hacia los concejales y miembros del gobierno».
También desde Ciutadans han cargado contra la capacidad de entendimiento de Pellicer. Su portavoz en el Ayuntamiento, Juan Carlos Sánchez, ha defendido que el alcalde «se acoge a este salvavidas» que es la cuestión de confianza «para aprobar los presupuestos que no ha sido capaz de pactar con la oposición».
La CUP, en cambio, ha respondido a la petición de Pellicer de hacer una oposición «coherente». La portavoz cupaire, Marta Llorens, se ha defendido alegando que «es su gobierno quien tendría que ser coherente».
El gobierno defiende las cuentas
Los tres portavoces de los grupos de goven han alabado la tarea de este en la elaboración de las cuentas. Daniel Rubio, portavoz de ARA Reus, ha defendido que los presupuestos «son realistas, no gastan más de lo que se tiene». Rubio ha añadido que el pleno se encuentra «instalado en el mismo discurso del año pasado», y ha acusado la oposición de no haber «adelantado ni una coma». El popular Sebastià Domènech, sin embargo, ha contraatacado alegando que «los presupuestos son como su gobierno: grises y para ir pasando».
Noemí Llauradó, portavoz de ERC, ha defendido que su grupo «ha trabajado en sus ámbitos», mientras que Montserrat Vilella, del PdeCAT, ha recordado a la oposición que la cuestión de confianza no consiste en «rendir pleuresía al alcalde». Finalmente, y ante la derrota en la cuestión de confianza, el alcalde reusense ha lanzado que «si la oposición no tenía ninguna alternativa tenía que dejar que el gobierno gobernara, pero han votado detenerlo todo treinta días».